La ya conocida por todos catástrofe asiática del 11 de Marzo ya está teniendo repercusiones en las producciones de automóviles en Europa por la falta de suministro de alguno de sus componentes. Pero ahora el problema se agrava y las consecuencias son ya visibles.
En Fukushima, la única en el mundo
El tsunami encargado de arrasar la prefectura de Fukushima destruyó por completo una planta de producción de pigmentos para la pintura de automóviles, única en el mundo.La podemos considerar así de exclusiva porque allí era el único sitio del planeta donde se producía el pigmento Xirallic, debido a que la patente es japonesa y está en propiedad de la multinacional almena Merck.
Menos brillo en los colores
El nombrado pigmento Xirallic es incorporado posteriormente a todas las pinturas prácticamente de automóviles actuales debido a sus matices brillantes.
Por lo tanto, la desaparición de esta planta productora del exclusivo pigmento, provocará una alteración en la coloración de los automóviles a simple vista, sobre todo en los vehículos con colores oscuros y la gama de rojos, perdiendo un poco de brillo.
El grupo Volkswagen, que ha sido el encargado de desvelar la noticia en el actual Salón de Shangai, ha advertido a su red comercial de que las entregas de sus próximos vehículos podrían tener una tonalidad ligeramente menos brillante a causa de la ausencia del Xirallic.
Nueva planta en construcción
Merck ha tomado medidas de urgencia debido a la gravedad relativa del asunto, y se ha mandado construir con rapidez inmediata una nueva planta del pigmento Xirallic, esta vez en Europa, más concretamente con total seguridad, en Alemania.
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