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WRC DE CALLE

Volkswagen Polo R WRC, la versión de calle

A imagen y semejanza del coche que está dominando el WRC con Sebastien Ogier, podemos disfrutar de este Polo más limitado.

Volkswagen Polo R WRC, la versión de calle

Volkswagen Polo R WRC, la versión de calle

Hecha la ley, hecha la trampa. Una de las máximas del automovilismo deportivo también tiene sus repercusiones en los coches de producción. Si en algunos casos derivados directamente de la competición aparecen ediciones especiales como el Lada Granta Sport Road proveniente del Mundial de Turismos o el Renault Megane en homenaje a Red Bull, en otras ocasiones los modelos aparecen como derivado directo de estar en la competición. Así ha nacido el Volkswagen Polo R WRC, que si bien está muy lejos de su primo hermano que tantos éxitos está cosechando en el Mundial de Rallies con Sebastien Ogier, es producto directo ya que la normativa del campeonato ha obligado a su nacimiento.

El reglamento del WRC y la homologación por parte de los coches en la FIA tiene una normativa clara que afirma que el coche de competición tiene que tener como mínimo 2.500 unidades del coche de producción para poder ser homologado. Por esta razón, ha nacido el Volkswagen Polo R WRC emulando al coche de competición con sus pinturas blancas y de franjas azul y gris. Estos colores de guerra de la marca vienen acompañados por detalles en los retrovisores, alerón, en las pinzas de freno de color azul y en las llanta de 18 pulgadas. En el interior además de tapicería de Alcantará, no faltan referencias al WRC con varios logos. En cuanto a equipamiento esta pequeña joya cuenta con los mayores avances de la casa alemana.

Volkswagen Polo R WRC, la versión de calle

Esencia de competición en la calle

Obviamente no vamos a encontrar en el Volkswagen Polo R WRC las prestaciones de su modelo de competición, pero tampoco nos vamos a quedar defraudados. Este modelo cuenta con un motor TSI 2.0 de 220 caballos, que si bien no se acerca a los 315 CV del coche de Jari-Matti Latvala y Sebastien Ogier, lo cierto es que no están nada mal. Con este motor arroja unos datos de aceleración de 0 a 100 km/h en apenas 6.4 segundos con una velocidad máxima registrada de 246 km/h. A pesar de contar con un cambio manual de seis marchas en lugar de un cambio DSG, gracias al diferencial electrónico, a las suspensiones deportivas y al motor ya mencionado este Polo es el más rápido creado hasta la fecha por encima del GTI.

Como sucede en estos casos, estas ediciones digamos "especiales" tienen el mayor de los peros en el precio. Si a este dato le sumamos que se trata del Polo más potente y rápido construido hasta la fecha no es de extrañar la cifra de 33.000 euros que pedirá Volkswagen en Alemania por hacerte con una de estas 2.500 unidades. Si tienes dinero y te gusta el WRC no te lo pienses mucho, ya que a partir de septiembre se empezarán a entregar las primeras unidades reservadas.

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