Para conseguir esta cifra, y no perder tracción a lo loco, se ayuda de la tracción a las cuatro ruedas, y su potencia es gestionada a través de una caja de cambios de doble embrague.
Perfección echa sonido
Pero un coche con un motor tan radical debe sonar de forma orgásmica cuando su conductor juega con las revoluciones. De momento no tenemos el placer de poder escucharlo de esa guisa, pero si podemos hacerlo mientras lo cargan en un camión, y podemos afirmar que suena a gloria.
Hay quien afirma que tras este sonido hay más trabajo del sistema de escape que de motor, ya que se trata de un concept. Yo prefiero pensar que si se ocultan 400 CV bajo el capó, y que el sistema de escape solamente el director de esta espectacular orquesta.
Os dejamos con el vídeo, para que vosotros mismos juzguéis sobre el sonido del Volkswagen Golf R400.
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