El equipo Peugeot afronta el Dakar 2016 con esperanza. Y eso que hay muchos factores contrarios. En primer lugar, la catástrofe del pasado año. En segundo lugar, la enorme hegemonía de Mini que parece indestructible. En tercero, la reducción de la arena y el desierto en el recorrido, ahí donde el 2008 puede sacar su máximo potencial. Pero lo que sí tienen es un escuadrón de lujo, comandado por un nombre mítico del Dakar, como Stephane Peterhansel y un Carlos Sainz siempre ambicioso. Además, otro histórico del Dakar como Cyril Despres será el tercero de abordo y mucho ojo, porque un campeonísimo como Sebastien Loeb tendrá mucho que decir en su primera aventura dakariana.
Y es que la marca del león quiere rememorar tiempos pasados. Aquellos en los que Ari Vatanen, Juha Kankkunen o Björn Waldegård se jugaban las victorias en el Lago Rosa con un Peugeot, bien 205 o bien 405. Allí cuando se acabó la época de los Grupo B en el Mundial y la marca francesa decidió dar el paso al Rally Dakar.El coche
Tras un año para olvidar, con muchos problemas y muy lejos de poder competir en los puestos de cabeza, Peugeot ha tirado la casa por la ventana. Rediseño de un coche, recontrucción del 2008 aplicando mejoras probadas en los test y con buen resultado en las pocas carreras que han corrido en este 2015.
El Peugeot 2008 DKR16 es más largo, más ancho, con un centro de gravedad más bajo, con un reparto de pesos diferente, con casi 300 kg de ganancia de peso, con un motor mucho mejor, con más potencia, con neumáticos mejores... y un sinfín de novedades que hacen del prototipo de este año mucho más fiable. Es cierto que su tracción, dos ruedas motrices, le deja en desventaja con respecto a los 4x4 en las pistas duras y más en un Dakar con menos desierto que nunca; pero será en las trialeras y zonas de fuerapista donde el DKR16 sacará su mayor potencial, superando los obstáculos como ningún otro prototipo.
Los pilotos
En cuanto a los pilotos, inmejorable cartel. Se mezcla la experiencia con las ansias de ganar. Un equipo ambicioso. El 'dream team' del Dakar. 17 victorias en el Dakar suman tres pilotos y, el otro, el novato, ha sido nada menos que nueve veces campeón del mundo de rallys. Un lujo para la marca del león.
Stephane Peterhansel, a recuperar la soberanía
'Monsieur Dakar'. Nadie tiene más victorias que él, nadie ha sido más laureado que él. Ganó en motos, seis veces; ganó en coches, otras cinco. Nadie conoce como él la carrera, no el recorrido, sino la carrera. Nadie como él para saber cuándo acelerar, cuándo aflojar, cuando guardar la ropa, cuando pensar en el día siguiente... nadie como Stephane Peterhansel. Podríamos estar hablando horas de él pero mirando su palmarés...no hace falta decir nada más. Además, a su lado llevar al habitual Jean-Paul Cottret, nada menos que 14 ediciones como navegante del Peterhansel.
El piloto francés destaca por su conocimiento de la carrera, como decimos, por su carácter ganador y su ambición, inagotable pese a ser su 23 edición y lleva ganando desde la segunda. Estratega y rápido a partes iguales, es el idóneo para iniciar la soberanía de Peugeot en el Dakar, para iniciar una nueva era con un protagonista del pasado y del presente. Este año, logró la victoria en la única prueba que ha disputado, el Rally de China, mostrando el buen nivel de un DKR15+. Pero los resultados del año ya no importan, ahora solo importa ganar el Dakar 2016.
Carlos Sainz, alejando fantasmas
En segunda lugar encontramos al piloto español. Es un luchador, un sufridor y un gran evolucionador de coches con lo que el trabajo realizado en el 2008 tendrá recompensa. Lleva buscando su segundo Dakar desde hace tiempo pero, por unas cosas o por otras, hace años, desde la salida de Volkswagen, que no cuenta con un coche competitivo. Su calidad está fuera de toda duda, supo adaptarse al Dakar desde el inicio y ha ido adquiriendo una gran experiencia. Además, a su lado, Lucas Cruz se ha ido convirtiendo en uno de los grandes navegantes del Dakar. Ya van siete años participando con los grandes pilotos de la carrera.
Acumula tres ediciones consecutivas abandonando, sin regularidad, sin una montura eficaz. Y eso que venía de triunfar con Volkswagen. Estuvo a punto de triunfar en la primera edición sudamericana, solo un fallo en el road book le apartó de su primer Dakar; luego, primero y tercero dejando para el recuerdo las luchas con Nasser Al-Attiyah. Ahora, vuelve su hora. Hizo una gran carrera en Marruecos, donde tuvo un problema de motor cuando lideraba el rally con mucha ventaja y eso aporta esperanza para que el día 16 podamos ver a Carlos Sainz levantando el trofeo del Dakar.
Sébastien Loeb, alma joven y ambiciosa
Da igual que sea su primera edición. Hablando de otros pilotos diríamos, 'con acabar vale, tiene que conocer la prueba, es solo su primer año...'. Pero con Loeb no. Nueve campeonatos del mundo de rallys y una ambición y ansias de éxito que siempre le han caracterizado. Su espíritu competitivo ha conquistado al mundo entero convirtiéndole en uno de los grandes pilotos de la historia, sino el más grande. Nadie duda que, pese a que será su debut, intentará estar delante y ser competitivo. Cuando a 'Seb' se le mete una cosa en la cabeza, lucha hasta que la consigue. Puede que no sea favorito para ganar pero sin duda que dará mucho juego. Le acompañará su inseparable Daniel Elena que también ha debutado este año en el mundo de los raids.
Este año ha tenido un buen debut, compitiendo en el Rally de Marruecos con problemas mecánicos pero con muy buenas sensaciones, peleando con los gallos del cross country. Su punto a favor será el hecho de que predominarán las pistas rápidas, sobre todo en una primera semana más de rallys que de raids. Pese a que el coche no tendrá ventaja en pistas duras, Loeb conocerá mejor el estilo de pilotaje en ese tipo de tramos. El tema de la conducción fuerapista y la navegación será el punto de inflexión que determinará cómo de rápido aprende el francés.
Cyril Despres, la confirmación de un campeón
Pocos cuentan con él pero, ¿se acuerdan de su palmarés? Cinco victorias en el Dakar, en la categoría de motos, y contra todo un Marc Coma. Es un estratega nato que debe adaptarse mejor a la conducción de los prototipos. Es cierto que no todos los vencedores en moto son buenos en la categoría de coches pero, al final, la experiencia es un grado. Con un vehículo más competitivo como es el DKR16 y con la habilidad y el conocimiento que posee Cyril, puede que en este 2016 haya llegado su hora.
Además, estrena un copiloto de quilates. David Castera, el que fuera director deportivo de la prueba y piloto de motos a finales de los 90, será su acompañante. Su labor, antes de que Marc Coma entrara al mando de la organización dakariana, le hace conocer a la perfección los pormenores de la prueba y eso es un punto a favor a la hora de navegar y afrontar el día a día. Despres debutó con un puesto 34 que seguro que será capaz e intentará mejorar. Apunta a un top 15 para confirmar su mejoría, lenta pero seguro que productiva.
Fotos: Prensa Peugeot Sport y Red Bull.
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