Pablo Quintanilla lleva siendo candidato a la victoria desde hace varios años. Tras dos años conquistando el Mundial de Rallys Cross Country, llega a su séptima participación consolidado como piloto de máximo nivel. El chileno, que este año peleó por el Campeonato del Mundo hasta el final, llega en plenas condiciones para pelear con KTM, Honda y Yamaha con su habitual hándicap: estar en un equipo más pequeño que los otros favoritos al triunfo.
De las caídas a la regularidad
Su debut en el mundo de los rallys y en el Dakar se produjo en el año 2013. En aquel momento aparcó el motocross, disciplina en la que había triunfado, especialmente en América, y participó por primera vez en la prueba más duro del mundo. En su debut dakariano, con Honda, ya dejó destellos de su clase pero una caída en la etapa 6 truncó todas sus expectativas. Lo mismo ocurriría al año siguiente, ya con KTM. Pero solo tres etapas le duró el sueño a 'quintafondo' quien volvía a irse al suelo y se veía obligado a abandonar.Poco a poco fue mejorando. De las caídas pasó a la estrategia, a regular... a jugar de verdad a esto del Dakar. Llegó al Dakar 2015 tras ganar el Atacama Rally y esa experiencia se fue notando en carrera. Cuajó una sensacional primera semana y apretó a fondo en la segunda, peleando con Toby Price por el podio. Al final, cuarto puesto y una victoria parcial fue el botín del chileno en aquella edición.
Pero su punto álgido llegaría en 2016, como piloto oficial Husqvarna. En aquel año el Dakar se abría tras la marcha de Marc Coma y la marca sueca, asociada a KTM, le otorgó la responsabilidad de lograr el éxito. Con esas mimbres salió al Dakar 2016 y acabó tercero, su mejor resultados hasta la fecha, cuajando una carrera muy inteligente. Pero la mala suerte regresó en los años siguientes.
Y eso que Quintanilla llegó a los Dakares de 2017 y 2018 como campeón del Mundial de Rallys Cross Country. Era ya uno de los gallos. En la edición 2017 se tuvo que retirar en la décima etapa, cuando marchaba segundo, debido a problemas de salud. Y en 2018, los problemas mecánicos durante los primeros días en Perú le lastraron para el resto de la carrera y se tuvo que conformar con finalizar octavo.
Un buen año pero sin Mundial
Pero lo bueno del Dakar es que cada año hay una oportunidad de révalida y de nada sirve lo ocurrido en años pasados salvo para aprender y mejorar. Ese aprendizaje que ha completado Quintanilla, que ha pasado de tener un sinfín de caídas a ser uno de los pilotos más fiables del panorama internacional. Este año ha vuelto a disputar el Mundial Cross Country y ha peleado hasta el final con Toby Price por el trofeo. El de Valparaíso no se ha bajado del cuarto lugar, finalizando primero en Abu Dhabi, tercero en el Atacama Rally y el Desafío Ruta 40 y cuarto en la cita final, el Rally de Marruecos, en donde no pudo con las KTM. Además, también finalizó en el podio en el Rally de Merzouga.
Y el Dakar actual se adecua a las características de Quintanilla en la medida que es un piloto formado y forjado en el Desierto de Atacama. Eso sí, Perú no es igual que el desierto andino. "Es muy complicado navegar en esas condiciones de piso, sumado al calor extremo de Pisco, Ica y Nazca, y a la geografía especial que tiene ese desierto comparado con el de Atacama o de Marruecos. Será un Dakar muy exigente, difícil, demandante en todo sentido", explica el chileno sobre la edición 2019.
El principal hándicap que tendrá 'quintafondo' será el estar en un equipo más limitado y pequeño que sus rivales. Es cierto que Husqvarna es una filial de KTM pero su estructura es menor que la marca oficial o que el Team HRC. Junto a la Husqvarna FR 450 Rally, su principal aliado será el estadounidense Andrew Short, su compañero de equipo, que tratará de estar cerca de Quintanilla en todo momento. Este año, el piloto de supercross ha cosechado buenos resultados en carreras internacionales como el Rally de Marruecos o el Desafío Inca, por lo que llega a buen nivel.
"Mi gran sueño es ganar un Dakar, es lo que falta sumar a mi palmarés". Le ha llegado el momento, la hora de cumplir su gran sueño. Y en 2019 tendrá la oportunidad de conseguirlo.
Fuente de las fotos: @Quintanilla102.
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