Rubén Gracia y su copiloto Diego Vallejo se proclamaron este fin de semana campeones de España de Rallys TT. El tercer puesto en la última prueba del campeonato, el Rally 12 h TT de Serón (Almería) les bastó para refrendar el título nacional que ya logró conseguir en 2014.
Pese a llegar como líderes, no ha sido nada fácil para la pareja Gracia-Vallejo el confirmar su victoria. De primeras, no podían utilizar su habitual Mitsubishi Montero ARC T3, que se encuentra camino de Buenos Aires. Así pues, Gracia salió a la prueba almeriense con un Mitsubishi L200 T1, un vehículo competitivo y fiable pero no es 'el de siempre'. Su principal rival era Ramón Vila, a 24 puntos del piloto madrileño.
Los problemas comenzaban pronto. En la Súper Especial del viernes, unos problemas de alimentación provocaron que la pareja Gracia-Vallejo sufriera en el corto tramo de 6,5 kilómetros. Finalmente, consiguieron salvar la papeleta y terminaron duodécimos. El campeonato se complicaba
Grandísima actuación para refrendar el campeonato
La jornada del sábado era la más dura, con más de 450 kilómetros de competición. Acabando segundos, cuajando una sensacional actuación y aprovechando los problemas de Vila, que incluso tuvo un accidente, allanaron el camino hacia el bicampeonato. Y, finalmente, el domingo, con una especial de 236 kilómetros, Rubén Gracia y Diego Vallejo se dedicaron a regular y conservar su ventaja asumiendo los mínimos riesgos. Estaba hecho, en meta, terceros en la general, se proclamaron oficialmente campeones de España de Rallys TT 2015.
"Todo el equipo hizo un excepcional trabajo todo el fin de semana en Serón", afirmaba el piloto madrileño agradecido a los suyos. Además, resaltaba la gran especial del sábado. "La etapa del sábado fue nuestro mejor tramo cronometrado que recuerdo. Fue realmente brutal y de una dureza casi épica", explicaba emocionado.
Tras confirmar que su objetivo el domingo era el de vigilar a sus rivales y llegar a meta con los menores problemas posibles, Gracia valora de gran forma su actuación, más teniendo en cuenta que no habían podido rodar con el Mitsubishi L200 antes de la prueba almeríense. "En la Súper Especial fue la primera ocasión que nos pusimos a sus mandos", confirmaba, algo que da mucho valor a su actuación el sábado. "Desde ya pasamos al 'modo Dakar'", sentenciaba Gracia. Y es que ese será su próximo objetivo: llegar a la meta de Rosario el próximo 16 de enero.
La prueba la ganó Jordi Torras, junto con Alex Roca, a bordo de su Herrator V8 Dakar. Segundos acabaron Óscar Fuertes y Daniel Cué (Herrator Evo T1) y tercero fue el mencionado Rubén Gracia junto a Diego Vallejo.
Fotos: GPR Competición.
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