Después de conseguir ganar el Dakar en 2004, 2005, 2007, 2012 y 2013 en la categoría de coches, este cambio a sus primeros pasos dentro de los raid supone toda una sorpresa. Sin embargo, el palmarés del piloto nacido en Vesoul no es nada despreciable sobre las dos ruedas ya que además de conseguir ganar el Dakar en las edición de 1991, 1992, 1993, 1995, 1997 y 1998, ya estuvo en este prueba en 2003 donde la rotura de la dirección asistida de su montura le privó de la victoria en el último segundo a favor de Hiroshi Masuoka, por lo que tampoco es que se estrene ahora en el Baja Italia.
Es curiosa la acción vivida en la Baja Italia de 2003 cuando después de lidera toda la prueba (cuatro pasadas) en el recorrido creado a los márgenes del rito Tagliamente, sufría una avería a 10 kilómetros de meta en su montura. EL piloto oficial de Mitsubishi rompía la dirección, dejando el camino libre al que era por entonces su compañero en esta estructura, el japonés Hiroshi Masuoka. Ese año además supuso posiblemente el año con mayor grado de mala suerte para el francés ya que en el Dakar también tuvo que abandonar cuando lideraba la prueba e incluso en Túnez incendio su coche en sus primeras andanzas a gran nivel sobre las cuatro ruedas.
Honor tifossi
Los tifossi podrán disfrutar de esta forma del once veces campeón del Dakar así como actual campeón en la categoría de coches que participará de esta forma en la primera prueba del Campeonato del Mundo FIM de Bajas. Con la intención de plantar cara a Alberto Basso, gran dominador en los últimos años y principal favorito, Peterhansel estará con una Yamaha para deleitar al público, algo que sin duda supone un gran honor para el director de la carrera, Mauro Tavella.
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