La primera: su vuelta ha sido de las de guardar en la videoteca, disco duro, memoria o donde sea. El segundo sector ha sentado cátedra poniendo al grupo a medio segundo por detrás suyo. Medio segundo es un mundo en el DTM.
La segunda, la precisión. La cámara superlenta en la primera curva y en la chicane rápida destaca la suavidad con la que Molina trasladaba el peso del DTM a lo largo de Oschersleben. El Audi no se movía en absoluto y rozar el 1:19 le ha valido la pole.
La tercera, los lastres. La aparición de la diferencia de peso que encontraremos a lo largo del año hará que veamos cosas así, pero no por ello van a dejar de ser excepcionales.
Mercedes en su línea
2014 no es el año para la marca de la estrella de tres puntas, al menos en el DTM. Con cuatro pilotos en los cinco primeros eliminados de la sesión clasificatoria. Dani Juncadella se ve afectado por el bajo rendimiento y saldrá de nuevo en la parte trasera de la parrilla. El mejor Merdeces, Pascal Werhlein en décima posición.
En cuanto a Marco Wittmann, el líder del campeonato sigue estando ahí arriba y termina segundo en la sesión clasificatoria, controlando con calma su liderato en el campeonato. La victoria de Hockenheim le da alas y un piloto motivado siempre es bonito de ver. Los BMW en general han estado a la altura y se han mezclado con los Audi en los ocho primeros, con un gran Antonio Félix Da Costa en cuarta posición.
Mañana carrera a las 13:35 con muchas dudas, pues la lluvia estará en la cabeza de todos, o eso dicen las previsiones. Mercedes podría salir beneficiado si las condiciones son cambiantes, pues el arriesgarse forma parte de las carreras en mojado.
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