En un momento donde todas las miradas están puestas en la adaptación del mercado europeo a los cambios eléctricos, no es de extrañar que se fijen especialmente en esas áreas o zonas donde se han eliminado cualquier tipo de ayuda a la compra y subvención de estos modelos. Ante esta situación, Noruega es el centro de atención, especialmente donde se han apuntado que el volumen de ventas ha caído en más de un 80% respecto a datos anteriores. Eso sí, es un dato ambiguo que no da mayor importancia y es puramente para alarmar antes de tiempo.
Otros países europeos pueden ser Alemania, que desde el 31 de diciembre de 2022, los coches eléctricos, que tenían un precio inferior de 40.000 euros, tenían un descuento de 9.000 euros, mientras que si era más caro, el descuento era de 7.500 euros, de los cuales, 3.000 venían por parte del fabricante. Ahora, la ayuda será de hasta 4000 euros y en 2024 de 3.000 euros. Eso si, hay que fijarse especialmente en lo que sucede en los próximos dos años, donde dejarán de ser subvencionados al uso.En Noruega se ha producido una caída importante con unos 1237 coches eléctricos matriculados en lo que llevamos de año, mientras que en Alemania solo ha caído un 13%. Eso si, no hay que alarmarse extremadamente y es que estos datos tienen truco. La población aprovechaba para comprar los modelos eléctricos en diciembre del 2022, fecha en la que contaban con la ayuda estatal, mientras que en enero se producía una fuerte caída.
Buenas expectativas de futuro
Alemania y Noruega están siempre en el foco de atención y no es para menos. Los dos países europeos se han potenciado especialmente por ser una referencia mundial por sus grandes prestaciones tanto en relación precio como por apostar por esta movilidad. Ahora toca ver cómo se va consolidando en el mercado y es que todo apunta que se irá recuperando poco a poco las cifras del pasado, en los que tendrán que esperar a que se consolide a largo plazo, por lo que tendrán que ayudar poco a poco desde la marca.
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