Hace menos de una año su carrera parecía acabarse, cuando fue víctima de un terrible accidente en las 500 Millas de Indianapolis, que puso en riesgo su vida.
Pero Mike Conway demostró ayer que aún puede dar mucho de qué hablar, consiguiendo su primera victoria en la Indycar, ganando la carrera de Long Beach.En carrera, en un primer momento tras la entrada del safety car en pista, y la masiva parada en boxes de prácticamente todos los coches, provocó que Conway fuese relegado hasta la duodécima posición.
Dos entradas del Safety car
Pero otra situación complicada en carrera que obligó de nuevo al safety car a reaparecer en la pista reagrupó de nuevo los coches. Mike que en ése momento iba en sexta posición, supo aprovecharse de la situación y una vez relanzada la carrera en tan solo dos curvas supo deshacerse de James Hinchcliffe y Alex Tagliani, una vuelta después, se quitaba de encima a Dario Fanchitti.
En éste instante de carrera, su compañero de equipo Ryan Hunter, se vio obligado a retirarse por un problema mecánico en la caja de cambios, y por tanto únicamente le quedaba adelantar a Ryan Briscoe. Muy difícil no lo tuvo, ya que el piloto australiano llevaba un ritmo muy lento, y esto le permitió a Mike superarle y conseguir sobre su rival una diferencia final de 6´´.
La segunda posición entonces fue para Briscoe que desde un primer momento había optado por montar gomas duras y adelantar su parada en box, lo que le benefició ya que fue dos vueltas antes de la entrada del safety car, lo que le supuso encontrarse fácilmente en las primeras posiciones.
Tercero fue Dario Franchitti, muy regular durante toda la carrera, y que consigue así distanciarse un poco más de su principal rival en la clasificación general de Will Power.
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