Sin embargo, ante la realidad de que los pilotos utilizan el push-to-pass para defender posición y con el fin de aumentar el factor estratégico los organizadores de la IndyCar han decidido que al apretar el botón que da potencia extra, esta no aparezca hasta pasados cinco segundos. Con este hecho se consigue que el factor estratégico del atacante prevalezca sobre el del defensor, que tendrá un gap de 5 segundos en respuesta al ataque de su rival, lo que facilitará los adelantamientos.
El impulso adicional proporcionado por este dispositivo a los pilotos se activará como hemos dicho cinco segundos después de pulsar el botón, lo que provocará que los pilotos atacantes tengan que calcular el momento de apretarlo para que se haga efectivo en la zona deseada y reducirá los beneficios de la defensa. Además, el botón solo entrará en funcionamiento cuando el motor esté a máximo funcionamiento, por lo que los pilotos podrán activar el botón a la entrada de una curva para usar el dispositivo a la salida.
Así lo afirma Trevor Knowles, director de desarrollo de la IndyCar: "Después de cinco segundos, cuando el conductor llegue a la máxima velocidad o cuando esté a pleno rendimiento, el adelantamiento se "encenderá". Esto inutiliza el sistema para defenderse y obligará a los pilotos a planificar el futuro".
Otros cambios
Además de la dinámica del Push-to-pass, tendremos algunos cambios de decoración en dos de los DW12. El primero que tendrá distintos colores será el debutante Josef Newgarden que lucirá una decoración en su monoplaza en claro apoyo a los deportistas de Estados Unidos en los Juegos Olímpicos con un logo que reza "Go USA".
Por su parte, Ryan Hunter-Reay no lucirá sus habituales colores amarillos y tendrá el monoplaza pintado de tonos verdes y blancos en apoyo a una asociación que lucha contra el cáncer, enfermedad que se llevó a su madre en el año 2009.
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