Si eres un piloto joven, es muy probable que si no tienes apoyos o un padrino se te cierren poco a poco las puertas a las competiciones de prestigio en Europa. Entonces es cuando decides intentarlo en Estados Unidos como en su momento hicieron pilotos de la talla de Will Power, Oriol Servià o Antonio García. En el caso de Simona de Silvestro, hace el viaje de vuelta. De la IndyCar a la F1.
Un viaje que le planta en la órbita de la F1. Casi que es como ese meteorito que está a punto de entrar en la atmósfera y empezar a brillar. De la mano de Sauber, Simona se convierte en 'piloto afiliada' y según vaticinan medios suizos, la podrían subir al Sauber en algunos entrenamientos libres de esta misma temporada. Sería la primera mujer en pilotar de forma oficial -en un Gran Premio- desde Giovana Amatti en 1992, lo malo que primero debe conseguir la Superlicencia.
"Éste es un gran paso hacia la consecución de un sueño de mi vida"-comenta de Silvestro-."Estoy realmente contenta de tener la oportunidad de dar este paso con un equipo tan fantástico."
¿Y la IndyCar?
Esa es la pregunta que muchos se hacen. Pues Simona abandona la especialidad al no encontrar asiento de cara a 2014, ya que Saavedra se impuso en la carrera por el volante de KV Racing, equipo en el que corrió Simona la pasada temporada.
Su trayectoria en la competición americana es conocida por todos, y el salto de calidad dado en 2013 es una prueba de su fiabilidad en pista. Consiguió su primer podio y una cantidad decente de puntos, acabando décimo tercera en la tabla final.
Su carisma no será el de Danica Patrick, pero sí que puede hacer que las mujeres se vean más cerca de la F1. Simona de Silvestro es de esos pilotos que busca el vértice en cada curva, que busca ir más rápido. Vamos, como tiene que ser un piloto de carreras.
Fotos: IndyCar
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