Sin duda, una imagen que une pasado, presente y futuro del Mundial de Motociclismo. El pasado lo pone la clásica Suzuki RGV500 con la que Kevin Schwantz fue uno de los hombres destacados de 500cc consiguiendo en 1993 el campeonato del Mundo con cuatro victorias. Aunque como hemos dicho la montura se trata del modelo de 1994 que con los colores de la marca tabacalera Lucky Strike consiguió dos triunfos y cuatro podios, sin duda ha sido especial verla pilotada por un piloto que actualmente lidera la categoría de Moto2 y tiene muchas opciones de subir a MotoGP en la próxima temporada.
Fiesta motera
El evento de carácter novedoso donde Reddding se puso subir a la Suzuki, también reunía a otras grandes motos clásicas. En un evento de estas características no podía faltar la presencia de grandes campeones como Giacomo Agostini, Phil Read, Wayne Gardner o Christian Sarron. Además de la exhibición, también se disputó una pequeña carrera, en la que Redding acabó segundo por detrás del Campeón del BSB de Supersport en 2009, Steve Plater, que para la ocasión pilotó la Suzuki RGV500 XR8.
"Situarme en la parrilla junto a estos campeones me hacía sentir como si realmente fuera a tomar parte en una carrera de 500cc. ¡Ha sido una experiencia increible!" comentó Redding que tras terminar el evento en el mítico Circuito de Spa Francorchamps, ha hecho las maletas con destino a Sachsenring, donde tendrá la difícil misión de parar el empuje que está imprimiendo Pol Espargaró, ganador de las últimas dos carreras de la categoría intermedia.
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