Eugene Laverty no pudo tener peor final con el equipo SMR de las World Superbikes. La escudería decidió cambiar de marca y pasó de Aprilia a firmar por BMW de cara a 2019. Esto no se lo esperaba Laverty, pero es que los pilotos elegidos para este nuevo proyecto son Tom Sykes y Markus Reiterberger, lo que deja al irlandés si un hueco dentro del equipo.
No obstante, el expiloto de MotoGP no quiso tirar la toalla antes de tiempo y empezó a buscar equipo dentro del paddock de las SBK. El irlandés lo ha conseguido y ha fichado por el equipo Go Eleven, un equipo privado que montará el nuevo chasis de Ducati V4 R.De todos modos, el irlandés admite que lo pasó muy mal tras saber que tenía que encontrar una alternativa si quería continuar en el mundial. Es por eso por lo que simpatiza con otros pilotos que se han quedado sin moto a pesar de su larga experiencia en el motociclismo. Pilotos como Loris Baz o el propio Xavi Forés han tenido que buscarse la vida fuera de la Superbikes.
"Sinceramente, ha sido muy estresante porque que te dejen tirado sin nada a finales de octubre no es lo ideal. Soy muy afortunado de haber podido encontrar un equipo porque aún hay pilotos con talento en las Superbikes que se han quedado sin equipo y esto es lo que asusta. Lo importante es que tengo una moto y lo segundo más relevante es que es una moto competitiva", comparte Laverty en Motorsport.com
Ya centrándose mucho en el 2019 Laverty espera tener una temporada más competitiva que esta pasada y confía en que el nuevo diseño de Ducati le ayude a mejorar su rendimiento.
"Sé que Ducati siempre da a sus clientes un nivel muy bueno con sus motos, como el equipo Barni Racing con Forés estos últimos años. Fue capaz de luchar con los pilotos de fábrica así que este será el objetivo. Parece que serán capaces de luchar con las Kawasaki arriba. Parece que Rea aún tiene margen, pero debemos cazarle y los primeros test con la moto fueron realmente asombrosos", continuaba.
Laverty también ha contado que cuando supo que Aprilia no seguiría en el mundial tartó de negociar una posible solución, pero la marca italiana ya lo tenía claro y por primera vez desde 2008 los de Noale no estarán la parrilla de SBK.
"Volé hacia Qatar para disputar la última carrera del año y mi plan era volver a casa desde allí. Al final tuve que cambiar mi vuelo para ir a Kuala Lumpur para poder hablar con Aprilia, porque aún estábamos intentando salvar de algún modo la RSV4. Desgraciadamente no pudimos hacer nada, pero es parte del trabajo. Cuando no tienes hueco tienes que buscarlo. Continué luchando y no me rendí", finalizó.
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