La recta final de Mundial sigue su curso y esta vez la nueva parada de MotoGP es en Australia. La mítica pista de Phillip Island recibe a un Mundial al rojo vivo, siendo uno de los más igualados que se recuerden. Aleix Espargaró espera poder marcar la diferencia respecto a la cita del Gran Premio de Japón, en la que pese a realizar un buen fin de semana, durante la carrera no fue del todo bien. Por ello, el español no descarta poner toda la carne en el asador para realizar una buena actuación en este exigente trazado, por lo que probarán todo lo habido y por haber para poder sacar el máximo partido a su montura.
El piloto del Aprilia Racing Team llega con buenas sensaciones a la cita de Phillip Island, puesto que durante la pretemporada y el pasado año, en este último con Suzuki, guarda un grato recuerdo al firmar una buena actuación en la desafiante pista australiana. El de Granollers, espera poder realizar un buen fin de semana y seguir en la línea de trabajo del pasado fin de semana, aunque reconoce que el resultado final no ha sido el esperado: "En la prueba del año pasado en Phillip Island, éramos competitivos e hicimos un buen trabajo. Llego a Australia para repetir el buen fin de semana Motegi, tal vez con un resultado de carrera diferente".El compañero de equipo de Sam Lowes ha dejado claro que no se rendirá en la parte final de temporada para lograr dejar a la firma de Noale en una buena posición en la general y es que, el español ha encontrado en Aprilia todo lo que necesitaba tras un final de temporada 2016 que no fue tal y cómo el preveía por todo lo que sucedió en su anterior equipo. Por ello, Espargaró ha afirmado que probará todo lo posible y más para poder firmar una buena actuación en las pruebas que restan del Mundial: "Tanto yo como el equipo estamos haciendo todo lo posible para terminar bien la temporada, tenemos tres oportunidades para obtener cierta satisfacción y no vamos a dejar nada sin probar ni pasar por alto ".
Artículos recomendados