A pesar de llevar tan sólo dos carreras de la actual temporada, Aprilia parece haber dado un pequeño paso adelante en su desarrollo como marca. Aleix Espargaró se muestra más contento con el rendimiento de su moto, con la que ha podido acabar en estos dos pasados grandes premios dentro del Top10. En Qatar cerró el grupo de los diez primeros mientras que en Argentina pudo acabar en la novena plaza. "Somos más potentes que el año pasado y estamos mejorando, pero no es algo que vayamos a mejorar en una semana", comentaba Aleix, inmerso en una lucha con su hermano menor, Pol Espargaró, por el noveno puesto en la clasificación general.
Y es que toda esta mejoría parece indicar a la llegada de Andrea Iannone al equipo. El italiano ha pasado por otras dos marcas en los últimos años, sumando una gran cantidad de experiencia e información que parece haberles servido de mucho en el box de Aprilia. Aleix Espargaró no ha dudado en agradecerle todos los datos que ha aportado su nuevo compañero en la llegada, especialmente en aquellos aspectos que se refieren a las dinámicas de trabajo que adoptan los ingenieros de fábricas como Ducati o Suzuki, en las que ha estado durante dos temporadas en cada una de ellas. A ello también se le añaden el trabajo de Bradley Smith, probador y wildcard de la fábrica."Andrea nos da mucha información acerca de cómo trabajan los ingenieros en Ducati y Suzuki", explica Espargaró. Sin embargo, la presencia del italiano en Aprilia no ha dado alegrías más allá de la información. Iannone, todavía pendiente de su adaptación a su nueva moto, no ha podido superar la decimocuarta posición en las dos carreras. En Qatar fue donde consiguió su mejor marca, entrando a cinco segundos de su compañero, mientras que en Argentina la cosa no mejoró: cruzó la línea de meta en decimoséptima plaza, 13 segundos más tarde que el español.
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