La noticia salió hace unos días tras ver que Ana Carrasco no estaba inscrita en la lista provisional ni de SSP300 ni SSP. Y ahora se ha confirmado: la piloto de 24 años vuelve al Mundial de Moto3 en el equipo que lo dejó para emigrar al WSBK, el BOE SKX, donde será compañera de equipo del rookie David Muñoz. La murciana deja atrás cinco años en Supersport 300 donde ha cosechado 7 victorias, 12 podios, 3 poles y 12 vueltas rápidas, además del título en 2018; e intentará demostrar de lo que es capaz sobre la KTM, llegando mucho más madura que cuando se fue.
El equipo BOE todavía no ha confirmado el fichaje, pero es un hecho que será en sustitución de David Salvador, que de momento estaría sin equipo para 2022. Ana no se va de un equipo cualquiera, sino de uno que considera su segunda familia, y la salida de Kawasaki no la está siendo fácil. "Las carreras son duras, no sólo en pista, donde la gente te ve, sino también en momentos como éste, cuando hay que tomar decisiones difíciles. Mi ambición es siempre crecer como piloto, ponerme nuevos objetivos que otros ven como imposibles y conseguirlos", comenta."Cuando mis padres me compraron mi primera minimoto y luego empecé a competir, por supuesto mi sueño era como el de cualquier piloto "algún día quiero ser campeón del mundo". Esto lo conseguí en 2018 y aún hoy esa sensación es mágica; pero cualquiera que entienda de carreras sabrá que todo piloto necesita luchar, ser ambicioso y ponerse a prueba una y otra vez", declara.
Y es agradecida con todos y cada uno de los integrantes que ha tenido desde que llegó a Kawasaki, donde la llevaron a crecer dentro y fuera de la pista. "Esta oportunidad de correr en Moto3 es un paso lógico en mi mente aunque el paso emocional sea duro. Me gustaría dar las gracias a todo el mundo en Kawasaki, que realmente me hizo sentir parte de una familia, por supuesto a mis compañeros en el box y a todos los miembros del equipo a lo largo de estos años, que me dieron la mejor moto para competir, además de Provec, que creó un ambiente profesional que era simplemente increíble", expone Carrasco.
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