La carrera de MotoGP que hemos vivido hoy en el Circuit de Barcelona-Catalunya ha sido de locos. Más semejante a una prueba de Moto3, la de MotoGP terminó por convertirse en una carrera de supervivencia, donde terminar pasó a ser todo un logro. A las altas temperaturas del asfalto se sumaron las delicadas curvas 5 y 10 y los numerosos accidentes múltiples.
Finalmente, de los 24 pilotos que se alinearon a las 14.00 horas en la parrilla de salida, solo cogieron bandera 13. Uno de ellos: Andrea Iannone. El piloto italiano se levantó hoy envuelto en un mar de críticas por su bajo rendimiento. Sus polémicas declaraciones de Mugello, donde cuestionó a Aleix como el mejor para liderar el proyecto, no se vieron respaldadas por resultados, con la 12ª plaza de Austin como mejor actuación hasta el momento. La QP de ayer tampoco le fue demasiado bien, y un problema con su moto en su último 'stint' le obligó a partir desde la última plaza. Sin embargo, en carrera consiguió mantenerse sobre la moto y cruzar meta en 11ª posición, a las puertas del Top10 y salvando un día negro para su equipo.
"En general, hoy nos llevamos a casa un buen resultado, más aún si tenemos en cuenta que tuvimos que salir desde el último cajón de la parrilla debido a la complicada QP de ayer", valora el italiano. "Hasta la mitad de la carrera pude mantener un buen ritmo y, de hecho, me estaba acercando mucho grupo que tenía delante. Sin embargo, luego tuve una caída de ritmo importante, ya que comencé a sufrir mucho por la degradación de los neumáticos. La moto comenzó a moverse y ya no era posible hacer buenos tiempos. En los test de mañana trabajaremos mucho en este aspecto para tratar de ser más constantes desde la primera hasta la última vuelta de la carrera".
Sin embargo, toda la atención se centró en el otro lado del box. Y es que Aleix Espargaró tuvo que ser trasladado al hospital en ambulancia debido a un fuerte toque con su compañero Bradley Smith, probador de Aprilia que competía bajo la licencia 'wild card'. Los fuertes dolores en su rodilla izquierda le obligaron a abandonar, incapaz si quiera de bajarse de la moto. "Lo siento por Aleix, espero que no se haya hecho mucho daño y le deseo una pronta recuperación", ha dicho Iannone, que no podrá contar con su compañero en los test de mañana.
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