El enduro de competición es quizá la disciplina offroad más accesible que existe. Sólo necesitas una moto, el equipamiento típico y poco más, las máquinas de venta al público son de tal calidad que algunos pilotos plenamente profesionales compiten con máquinas valoradas en menos de veinte mil euros y ganan competiciones internacionales. El enduro consiste en una serie de tramos cronometrados enlazados por secciones donde el piloto debe intentar llegar dentro del tiempo límite. Además del enduro actual hoy día existen el cross-country (prueba de resistencia en circuito cerrado, sin enlaces y con salida en masa), endurocross (un supercross con obstáculos donde se usan motos de enduro) y el enduro extremo, que aún hoy día no tiene un formato fijo pero suele consistir en recorridos con obstáculos mucho más complicados de lo normal. Pese a las diferentes modalidades y lo barato que es apuntarse y competir dignamente, tiene puntos flacos que solucionar.
Dentro del enduro tradicional la tendencia actual es que cada tramo cronometrado debe ser una crono donde el terreno relativamente plano, casi sin saltos, hace que el paso por curva lo sea todo, un cross donde a veces se usa un circuito de motocross y una extrema con obstáculos complicados. Los tres tipos de tramo son relativamente cortos y los pilotos deben completarlos dos, tres o hasta cuatro veces durante un mismo día. El problema con este formato es que el organizador del evento no tiene apenas libertad ni en distancia ni en tipos y todas las competiciones se acaban pareciendo. Con una mayor libertad podríamos ver eventos con mucho más caracter como el EnduroGp de Finlandia de este año. Siguiendo con el formato otro error cometido es el separar ambos días de competición, cada uno con sus puntos y devolviendo los cronómetros a cero tras el primer día. Imitar a los rallies de coches y juntar los días, sumando tiempos, haría que la competición fuera más interesante además de hacer los resúmenes del Campeonato del Mundo bastante más simples.
El cross-country enduro es una modalidad que mezcla elementos del motocross, el enduro y hasta la resistencia. En Europa no es del todo popular pero es la modalidad más practicada en USA, con varios eventos al año juntando más de 600 máquinas entre jóvenes, amateurs y profesionales. El mayor problema con el cross-country es que actualmente los recorridos usados comparten más y más secciones con los circuitos de motocross que a veces organizan las citas. Es importante mantener la distancia entre el motocross y el enduro, ya sea tradicional, cross-country o hasta endurocross.
El endurocross, una invención española, también parece estar padeciendo el parecerse demasiado con el supercross, con obstáculos muy suavizados a base de poner tierra delante transformando un escalón en una rampa o bache. Por suerte, el Campeonato del Mundo de Superenduro parece haber entendido que es necesario que los elementos sean difíciles pero aún queda mucho que hacer en AMA Endurocross. El otro rasgo a pulir para el endurocross es el formato. Aunque el formato multifinales tiene lo bueno de ver a los mejores pilotos en varias ocasiones, por otro lado se pierde el encanto de ver la lucha por entrar en la final por no hablar del drama que puede ocurrir cuando una estrella comete un error y debe remontar o hasta recurrir a la repesca. Además, el ser varias finales obliga a que sean carreras breves, donde algo tan característico del enduro como es la resistencia física tiene poco valor. Pasar a una o dos finales más largas además de incluir las semifinales en el programa principal debería ser el camino a seguir.
El enduro extremo es algo así como ese artista que se hace famoso después de sacar su quinto disco. Aunque las primeras competiciones que hoy día se denominarían así datan de principios de los noventa su popularidad es bastante más reciente. La especialidad hoy día está cargada de problemas una vez te fijas. Lo primero es que no hay un formato definido. Hay pruebas que funcionan como los enduros tradicionales, pruebas de larga distancia que incluyen hasta orientación, otras tienen una salida en masa y algunas hasta tienen fases donde la lista de competidores se va reduciendo más y más. Otro problema que en ocasiones está realmente arruinando algunos eventos es que a veces los recorridos casi no se prueban y llega a haber obstáculos completamente infranqueables, eso es inaceptable y hace falta que los organizadores prueben los recorridos el día anterior y cuenten con alternativas cuando la meteorología es adversa.
Siguiendo con la versión más dura de uno de los deportes más físicos llegamos a dos aspectos que me siguen sorprendiendo después de varios años: no hay ningún campeonato internacional serio y ninguna federación lo regula como se debe. Más de dos décadas de historia y una fama cada vez mayor pero no existe ningún gran campeonato internacional que recoja las principales fechas (existe un ranking organizado por una empresa española pero no está apoyado por ninguna federación) y los principales eventos no están regulados por la FIM. No hay controles anti-doping, no hay casi limitaciones en la parte mecánica y eso no puede ser bueno. Estamos ante una modalidad basada en un esfuerzo físico titánico donde los pilotos no pasan tests y una de las muy pocas restricciones para las motos es el tamaño de neumático para que eviten usar ruedas de moto de trial.
El enduro es un muy buen deporte a motor, tanto para practicarlo como para disfrutarlo detrás de la cinta o de una pantalla. Es uno de los pocos deportes donde, con algo de dinero, cualquier usuario puede tener una máquina capaz de enfrentarse cara a cara con la usada por el campeón del Mundo. La variedad de marcas es descomunal, con hasta ocho fabricantes produciendo modelos de buena calidad que pueden ser usados tanto para salir en fin de semana como para ganarte el derecho a subirte a lo más alto del podio por no hablar de las piezas que puedes comprar para mejorar tu montura. Pese a todo no hay que olvidar que hay aspectos que mejorar y algunos que necesitan una gran reforma. ¡Que nos guste no significa que sea perfecto!
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