Cal Crutchlow ha conseguido recuperarse a tiempo para los primeros test de IRTA oficiales, que dieron comienzo hoy en el circuito malasio de Sepang. El inglés sufrió una de las peores lesiones que un piloto puede tener, rompiéndose el conocido como pilón tibial. Tras un duro invierno, Cal ha podido subirse hoy a su RC213V para dar las primeras vueltas sobre una moto desde la Q2 del Gran Premio de Australia.
La lesión, aunque por su nombre pueda parecer simple, fue muy compleja, rompiéndose el pilón tibial, la fibia y el astrágalo de su tobillo derecho, acumulando un total de 17 fracturas. Como resultado final, Cal ingresó en el hospital con el tobillo completamente deshecho, siendo intervenido de modo inmediato. Quienes sufren este tipo de lesión suelen estar hasta un año sin poder caminar. Asimismo, es común que los pilotos que la sufren acaben por retirarse ante la incapacidad de volver a pilotar con soltura.
Crutchlow, en una entrevista reciente al diaro Motorcyclenews.com, aseguró haber temido no volver a correr. "Desde el principio supe que era una lesión muy grave, mi cirujano me dijo después que estuvieron muy cerca de tener que fusionarme el tobillo por lo mal que estaba la fractura. Se conoce como fractura de pilón, y básicamente es lo peor que te puede ocurrir. Tuvieron que reconstruir el astrágalo, y eso era lo que más me preocupaba. Esa parte ha ido bien. Tengo dos placas en mi tibia, una en el interior y otra en el centro, pero en el peroné no me la pusieron, y eso parece ser que me causa el dolor que estoy sufriendo ahora. El problema es que no tenían sitio para poner ahí una placa".
"La gente que sufre este tipo de fractura puede llegar a estar un año sin andar, y hay pilotos que han tenido que abandonar el motociclismo tras romperse el pilón tibial. Han sido tres meses muy difíciles. He tenido antes grandes lesiones, pero no de este nivel. Conozco a gente del mundo de la moto que se ha tenido que retirar a causa de esta lesión. Hubo momentos en los que, siendo sincero, pensé que nunca podría volver a pilotar de nuevo. Pero siempre tuve el deseo de seguir entrenando, de continuar yendo al fisioterapeuta. Mi estado mental seguía siendo competitivo y quiero seguir en MotoGP. Nunca tiré la toalla", declaró el dorsal #35.
Pese al tormento por el que se ha visto obligado a pasar en este parón invernal y a que todavía tardará unos meses en volver a estar al 100%, Crutchlow ha completado una buena primera jornada de test, más aún si tenemos en cuenta que no se sube a una MotoGP desde el pasado mes de octubre. Cal, con 1 kg de lastre debido a las placas de su tobillo, ha registrado hoy el 14º mejor tiempo, quedándose a 1.060 segundos del más rápido (Márquez) y completando un total de 51 giros al trazado asiático. Veremos si, una vez los novatos se hayan amoldado a sus nuevas monturas, es capaz de mantener esa posición.
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