Dani Pedrosa y HRC han decidido separar sus caminos en el mundial de MotoGP. La noticia tomó por sorpresa a todo el paddock, ya que se daba por hecha la renovación del piloto de Sabadell con la firma nipona. Sin embargo, tras 18 años de relación, ambas partes seguirán un camino diferente en el futuro, poniendo punto y final a uno de los proyectos más longevos y fructíferos jamás vistos en el mundial de motociclismo.
El comunicado oficial salió este martes, con una escueta nota de prensa publicada en la página del equipo oficial donde se anuncia la separación de caminos y se expresa un formal agradecimiento a Pedrosa por sus servicios a lo largo de los años, acompañada de unas declaraciones aptas para todos los públicos por parte del presidente de HRC y Dani Pedrosa. La forma y el momento de anunciarlo no es sino un fiel reflejo de cómo se ha ido estropeando la relación entre el equipo y el piloto a lo largo de las temporadas; un deterioro que se vio agravado por la falta de resultados y, principalmente, por la llegada de Alberto Puig como Team Manager. No es ningún secreto que Puig y el que en su momento fue su pupilo y protegido no terminaron bien, con rencores que a día de hoy no parecen haber desaparecido y que han podido influir de un modo decisivo en la marcha de Dani.
Pedrosa pasó en las últimas temporadas de ser un claro y respetado aspirante al título a ser el segundón allá donde fuese, con continuos menosprecios a su persona y a sus logros deportivos (el equipo dejó de llevar la moto de Dani a las presentaciones, haciéndolas solo con la moto de Marc, algo que no se ve ni en los equipos más humildes de la parrilla). Asimismo, poco fue el interés del Repsol Honda Team por defender al español ante Dirección de Carrera, dejándole completamente solo en situaciones en las que deberían haber estado allí arropándole (algo que sí hicieron con Marc Márquez en acciones mucho menos justificables o en las cuales el hexacampeón del mundo tenía la culpa).
La noticia pilló por sorpresa a todos, ya que su renovación se daba casi por hecha. El valor de Pedrosa, un piloto que lleva 13 años pilotando la misma moto, es altísimo para la marca, no tanto en resultados sino en su labor de evolución y desarrollo de la montura. Muchas fueron las ocasiones en las cuales se dijo que sin Pedrosa, Marc lo hubiese tenido más difícil para ganar. De todos modos, es innegable que Dani se fue desinflando con el paso de los años, rodeado siempre de un aura de mala suerte que mermó sus resultados (el complicado síndrome compartimental que sufrió en silencio varios años, la llegada de unos Michelin traseros demasiado duros para su peso, las lesiones habituales en su menudo cuerpo, etc.). Este año parecía que por fin se había librado de este aura, pero no fue más que una falsa esperanza; en Argentina Zarco se lo llevó puesto, sufriendo una fractura en su muñeca derecha que limitó su actuación en Austin dos semanas después, y en Jerez se vio envuelto en el accidente múltiple del cual es más inocente que culpable. Un pésimo fin de semana en Mugello, donde calificó 20º y se fue al suelo en la segunda curva, parecen haber sido la puntilla para Pedrosa. Con 13 temporada en MotoGP y 18 vinculado a HRC, Dani abandona el equipo de su vida, con el cual logró 3 subcampeonatos y 31 victorias en la categoría reina del motociclismo.
Su marcha deja libre una de las motos más codiciadas del campeonato, y ya hay muchos nombres que suenan para firmar con el Repsol (véase Morbidelli, Mir, Iannone o hasta Jorge Lorenzo). El futuro de Dani se presenta incierto, ya que con casi todas las motos competitivas ocupadas su marcha a SBK es más que probable. El piloto dijo que en este momento de su vida "necesitaba nuevos retos" y que "era el momento de cambiar". De todos modos, Dani hablará sobre su futuro en el GP de Catalunya, dentro de dos semanas.
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