Dani Pedrosa llega al Gran Premio de Francia con confianza de hacerlo bien en uno de los circuitos en el que mejores resultados ha cosechado. Este fin de semana no llega en su mejor momento físicamente hablando. La acción de la caída en Jerez en la que se fue al suelo de forma muy fea le hizo lesionarse su cadera derecha. "Estoy más o menos bien, aunque mi cadera está hinchada y tengo mucho líquido", declara el #26, que sin embargo cosechó unos buenos test en Jerez y Mugello.
Respecto al líquido, admite que tendrán que esperar para poder extraerlo: "tengo que esperar a después del test de Barcelona para ver si extraemos el líquido. Estoy un poco preocupado porque no puedo hacer lo que debería, porque se precisa de reposo". Unos test en Montmeló que se darán a cabo después de este GP para probar el nuevo asfalto.
A pesar de no terminar la carrera, el piloto de Honda está contento con su moto y con ganas de hacerlo bien en Le Mans. "Estoy contento por el trabajo que hicimos con el equipo durante los entrenamientos posteriores a la última carrera, me da confianza y me hace tener ganas de ir a la siguiente prueba".
Para ganar, todos los factores tienen que ir bien, y en eso Dani Pedrosa es muy consciente. En Francia el tiempo es muy cambiante y eso puede dificultar el comportamiento de los neumáticos. "El Gran Premio de Francia siempre presenta distintos retos, empezado por la meteorología, que suele ser impredecible. La temperatura puede ser baja, lo que complicaría la elección de los neumáticos".
A escalar posiciones
Dani quiere dejar atrás los resultados anteriores y empezar a remontar en la clasificación. Ahora se encuentra undécimo con 18 puntos, a 52 de su compañero de equipo Marc Márquez. "Intentaremos mantener la concentración y hacer una buena carrera", zanja.
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