Jack Miller abandonó el asfalto británico con un mal sabor de boca. Un fallo en el dispositivo de salida de su Ducati obligó al australiano a rezagarse en una octava posición. El dispositivo, cuyo cometido responde a bajar la altura de la suspensión trasera de la moto con el fin de mejorar la aceleración, supuso una mala jugada para el piloto del Pramac.
En esta línea, Miller, asegurando que durante las primeras curvas del Gran Premio de Gran Bretaña experimentó una emoción similar a 'volar en helicóptero', confiesa haber dudado de la eficacia de este dispositivo con anterioridad. "El dispositivo no se desactivó y me encontré con la Desmosedici sentado en la parte trasera con 20 motos pasando por todos lados. Depende de la pista, en Phillip Island, por ejemplo, no podemos usarlo porque para desconectarla necesitamos 'sentir' una transferencia de carga" expresaba.Por otro lado, en declaraciones recogidas en GPone.com, el australiano asegura haber experimentado miedo durante la cita británica. "Obviamente me pasaron durante todo ese momento. El hecho es que la clave que nos permite mejorar el inicio no siempre se usa, pero en Silverstone pensé que era útil. En Dovi, sin embargo, funcionó sin problemas. En mi caso, al estar frente a mí, no pude frenar con demasiada decisión, ya que había 20 motos detrás de mí. Tan pronto como pude, hice una especie de "rastrojo" y logré desconectarlo, pero fue un mal momento" zanjaría el piloto de Pramac.
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