Ducati afronta este 2018 con más ganas que nunca, y es que quieren a toda costa ganar el mundial de MotoGP. La marca italiana lleva 10 años sin lograrlo, desde un tal Casey Stoner en 2007. El australiano llegó, vio y venció. Y este año no hay escusas, la moto funciona, según Andrea Dovizioso mejor en todos los aspectos respecto al año pasado, con Jorge Lorenzo en su segundo año con la marca y ansioso por volver a ganar.
Andrea Dovizioso: quiere revancha
El italiano asegura que faltan por mejorar algunas cosas, pero admite que la de 2018 es la mejor Ducati que ha pilotado. "El año pasado creamos una buena base. Ganamos seis carreras y nos jugamos el mundial, con lo que la base está. Tenemos nuestras características, con aciertos y defectos, pero nos faltan algunos aspectos. La moto nueva es un poco mejor en entrada, mejor que la del año pasado, con lo que sí es la mejor Ducati que he probado".
Lo que demostró el año pasado y lo que ha demostrado en pretemporada es que será uno de los favoritos al título de nuevo, aunque el de Forli eso no le va a cambiar. Va a seguir siendo el mismo tipo tranquilo sin demasiada popularidad, que intentará deshacerse de la presión en la medida de los posible. "No tengo muchas dudas sobre si lograré hacer lo del año pasado, no me preocupa esto. Mejoré algunos aspectos con 31 años, también en la vida. De hecho, vivo mucho mejor, porque soy consciente de algunas dinámicas", comenta el veterano piloto, que el próximo día 23 cumplirá 32 años. Toda esa experiencia que atesora, lo plasma de maravilla en la pista, sabiendo cuando tiene que sacar su caballo blanco o su caballo negro.
'Dovi' por lo tanto llega muy motivado a la primera carrera sabiendo que su moto va muy bien. "Puede que haya sido el mejor test de mi vida. Estoy muy contento. Sabíamos que seríamos rápidos pero fue mucho mejor de lo esperado. La moto fue bien en todas los condiciones, y eso es muy difícil en MotoGP". Y añade que va bien con cualquiera de los dos chasis. El #04 habló sobre el buen estado de la pista qatarí, un circuito en el que siempre ha rodado rápido, tanto por él como para la Ducati. En los tres últimos años finalizó en segunda posición y el domingo que viene querrá dar el último paso.
Jorge Lorenzo: llegó su hora
El mallorquín comenzará motivado su segunda temporada con las motos rojas. Tras un primer año de menos a más, pero siempre por debajo de sus propias expectativas, este 2018 tiene que ser el de la explosión. Tiene y quiere que ser el Jorge que gane carreras de semáforo a bandera, y eso es lo que intenta, que la Ducati se parezca a la Yamaha, que sea más suave y gire más en el paso por curva. Pero esa perfección que busca es difícil encontrarla, y más cuando estuvo 9 años con la Yamaha. Pero ya lleva 1 año de experiencia y con su talento, debería de luchar por los podios en cada carrera.
Sueldo más justo
Los tres podios y el séptimo puesto en el campeonato del pasado año no se correspondían con el sueldo que contemplaba el #99, según Paolo Ciabatti. Y es que sus 12 millones por temporada se verán reducidos también por el buen hacer de Dovizioso, y la marca ya dijo que los salarios debían igualarse. "Ahora la situación es muy distinta. Cuando contratamos a Jorge, él tenía una oferta muy importante de Yamaha para seguir allí otras dos temporadas y era campeón del mundo. En el momento en que renovamos a Andrea, a mitad de 2016, nunca había ganado una carrera con Ducati. Estas cosas hay que tenerlas claras", asegura Paolo.
Pero no dudan en Jorge, y quieren mantener a sus dos pilotos. Algo que cerraría las puertas a Danilo Petrucci, que aun así mantiene las esperanzas para pilotar la moto roja, a pesar de que ya cuenta con una GP18. Danilo tiene también otras ofertas con motos oficiales, como Aprilia. La semana que viene empezaremos a ver si esta puede ser la temporada de Lorenzo y vuelva a ser el ganador que ganó tres mundiales con Yamaha.
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