No es la primera vez que Marc Márquez es recibido en Cervera con una fiesta de tal calibre, ya que también le sucedió cuando ganó 125cc en 2010 y Moto2 en 2012. Sin embargo, este año ha sido más especial que nunca puesto que la celebración ha sido espectacular. Marc, junto a su hermano Álex Márquez, rookie del año en la categoría de Moto3, ha dado una rueda de prensa para atender los medios antes de salir a las calles a empaparse de una multitud entusiasmada con su vecino más internacional.
Fin de fiesta
La fiesta por las calles ha terminado en un escenario desde el que los hermanos Márquez han podido dirigirse a todos sus incondicionales a pesar de la lluvia y del conato de nevada. Marc Márquez ha sido el gran animador de una fiesta en la que no ha dejado de agradecer a su equipo, autoridades y especialmente a la afición, su apoyo incondicional en una temporada histórica. A su vez, el 93 comentaba: "Estoy muy contento de haber podido celebrar el título aquí, en mi pueblo, con todos estos incondicionales que aunque llueva o nieve han venido a apoyarme. Es súper bonito y un honor para un piloto poder recibir todo este cariño de tu afición".
"Está claro que un día como éste es necesario para todos. Un título así se tiene que celebrar bien, porque siempre cuesta mucho conseguirlo y también es un poco suyo. Les estoy muy agradecido por el apoyo que me dan, cada vez en los circuitos veo más gente con banderas y camisetas del 93, y eso me hace mucha ilusión. También quiero dar las gracias a mi equipo, que no podían faltar a esta fiesta y son los que han hecho posible un año como éste" ha terminado de comentar Márquez.
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