Se acabó el invierno y con él, la espera. La pretemporada de MotoGP ha puesto punto final para dar paso a un 2018 que se prevé muy competido y, por primera vez en dos años, parece que el Repsol Honda ha sabido navegar en la dirección correcta durante unos entrenamientos, en los que ya se han desvelado las primeras cartas. Una de ellas, son las intenciones de la marca japonesa de cara a esta temporada.
Si bien durante 2016 y 2017 la marca del ala dorada tuvo que suplir a lo largo del curso -y como se pudo- las carencias de un invierno que le dejaban entre titubeos de lo que sería la campaña, para esta nueva temporada, las sensaciones simplemente le permiten soñar con repetir su único objetivo: volver a conquistar el título.A pesar de que existen pocas certezas, incluso se podría decir que cada vez menos, las dudas con las que desde Honda empiezan el nuevo curso no son -para nada- las mismas con las que afrontaron otros comienzos y es que, la marca japonesa, ha sido una de las que mayor evolución ha presentado a lo largo de esta pretemporada.
No solo los resultados -con los que desde el box nipón han conseguido meter miedo al resto de rivales- confirman este progreso sino que también, el rendimiento de sus dos pilotos oficiales -además del de los satélite- ha dado mucho de que hablar. Y al final, ellos, son los verdaderos protagonistas.
Dani Pedrosa y Marc Márquez tienen en sus manos conseguir de nuevo un título en el que, a priori, el ilerdense parte bajo la etiqueta de favorito y es que, al final, solamente es uno quien puede grabar su nombre en la historia de una categoría donde cada vez más, surgen nuevas amenazas.
Nadie regalará nada. Es más, esto es algo que nunca se ha hecho en MotoGP. La rivalidad desemboca en la ambición de querer más y ese algo más, es lo que parecen tener desde Honda para ser ellos quienes se sitúen como la referencia y marquen la diferencia de una temporada en la que, el primer reto, lo llevarán a cabo desde un territorio hostil.
En Qatar, la marca japonesa no conoce la victoria desde aquel 2014 en el que Marc Márquez encadenó 10 triunfos consecutivos pero, sin embargo, a pesar de que en esta temporada parece que el inicio no será igual de propicio que por aquel entonces, lo que sí ha dejado claro el ilerdense es que lo más importante, es tener una buena base que te permita encontrar un ritmo constante. Y así ha desarrollado él su pretemporada.
Márquez ha cuajado un invierno muy regular en el que, a pesar de no haber terminado en lo más alto de ninguna de la tabla de tiempos a excepción de la de los test que se realizaron en Valencia tras el último Gran Premio de 2017, siempre ha sido capaz de rondar las primeras posiciones y además, con un ritmo al que pocos pilotos se han podido acercar.
Ahí está la clave, en tener algo más que el resto. Y ese algo más en el caso del campeón del mundo, parecen ser esas ganas de seguir arriesgando las cuales, le mantienen insaciable y siempre a expensas de poder mejorar esto por aquí, aquello por allá... en resumen, mejorar. Siempre mejorar.
Y a pesar de que el inicio no pueda ser el más propicio, las cosas nunca son como comienzan sino como terminan. Por ello, desde el box de Honda tendrán todavía 18 Grandes Premios más por delante, para seguir mejorando y demostrar que la RC213V, está preparada para reconquistar un título que, en caso de llegar de la mano de su actual campeón, esto le permitirá a Márquez alcanzar a Mick Doohan en número de coronas dentro de la clase reina, sumando ambos un total de 5. Pero tampoco hay que olvidarse de Dani Pedrosa.
El español no se lo pondrá nada fácil a su compañero de equipo como tampoco, al resto de rivales. Al final todos lo son, todos compiten bajo la misma etiqueta. Sin embargo, a lo largo de esta pretemporada, Dani parece haber encontrado un rival que ha sobresalido por encima del resto: él mismo.
El dorsal número 26 también ha buscado mejorar en todos los aspectos posibles, ha ido a más a lo largo del invierno y se ha centrado más que nunca en si mismo para disputar un año en el que él también, quiere llegar con opciones de luchar por todo hasta el último momento.
Con el trabajo hecho -aunque nunca se termina del todo- no valen las excusas. A pesar de haber sido capaces de marcar una mínima diferencia por encima del resto, tanto pilotos como el resto fábricas también han demostrado ser competitivos y todo está en el aire.
Por delante, 19 escenarios en los que cada cual presentará sus debilidades y fortalezas a lo largo de una temporada donde quien menos ceda ante el prójimo, será quien brille en lo más alto. Y desde Honda están preparados para brillar.
Artículos recomendados