Tras ausentarse durante cuatro citas, Jorge Lorenzo aterrizaba en Silverstone con ganas de recuperar el tiempo perdido. De esta manera, el piloto de HRC se hacía con la decimocuarta posición en el trazado británico. Una semana después, los pilotos de la categoría reina emprenderían su camino a Misano, escenario donde se ha realizado una jornada de test privados de cara a la prueba italiana. "Desgraciadamente no estoy muy contento con mi espalda. Después de haber hecho un gran esfuerzo en Silverstone y tener que dar muchas vueltas en esas condiciones, sufrí mucho tras la carrera. El lunes y martes la situación mejoró un poco, pero llegué aquí nuevamente con dolor" expresaba el #99 tras concluir la prueba.
Como activación y confianza, el piloto balear llegaría a Misano con el fin de recoger toda la información necesaria para el Gran Premio. Sin embargo, los dolores de espalda no han permitido el balear acaba su cometido, obligando a retirarse inmediatamente de la prueba. "Me siento muy mal en la moto, así que preferimos dejar estos test aquí y pensar en ponernos al día para la próxima carrera. Ahora estoy un poco peor que en Silverstone. Las 20 vueltas de la carrera han aumentado la inflamación de la lesión, por lo que también ha aumentado el dolor. Seguramente necesitaré un período de 10 a 14 días para que la lesión se vaya y llegue con más fuerza a la carrera de Misano".Ondeando bandera blanca, Jorge Lorenzo abandonaba el circuito italiano, dejando al equipo de HRC un total de 31 vueltas v realizadas en la sesión matutina. "Probamos nuevamente el nuevo chasis y me gusta más que el anterior, así que aquí creo que comenzaremos el fin de semana con ambas motos usando el nuevo" concluiría el piloto español. Por el momento se desconocen más detalles acerca del estado físico del balear, pero fuentes cercanas aseguran una recuperación lenta y tediosa para el #99.
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