La moto perfecta no existe aunque los equipos se esfuercen para conseguirla. Los equipos de pruebas no paran de trabajar y probar novedades que desde las fábricas esperan que sea la solución a sus quebraderos de cabeza. En Ducati vimos la llegada de los peligrosos y antiestéticos alerones, algo que se sumaron algunos equipos más tarde.
Uno de los pilotos que más experiencia tiene con Honda es Cal Crutchlow. El británico que tiene un contrato directo con HRC ha destacado que para él actualmente es la RCV 123 la montura más física que existe en la parrilla de MotoGP. Tanto es así que tienen que trabajar en varios aspectos, especialmente en la frenada con tal de conseguir recortar la diferencia con sus máximos perseguidores. De este modo, se llegaría a considerar que los pilotos se ven obligados a rodar por encima de su límite en todo momento: "La Honda es la moto más física de todas. No gira, pero es muy buena en las frenadas. Lo que pasa cuando nos caemos allí (en la frenada) es que frenamos demasiado fuerte, demasiado profundo, y se nos cierra de delante. Lo peor de todos es tener que lidiar con las salvadas de Marc, que hacen que los demás parezcamos idiota"El recién llegado al equipo, Jorge Lorenzo, considera que el británico se equivoca, puesto que considera que es la montura de Borgo Panigale la más física de la parrilla puesto que obliga al piloto a sacar el máximo potencial de su pilotaje. Según el balear, las sensaciones que obtuvo en los test con la Honda fueron muy positivas y se encontró una moto totalmente distinta a la que esperaba: "No estoy de acuerdo con lo que opina Cal. Él ya lleva en Honda varios años, no sé si las motos han cambiado mucho, o puede que ya no se acuerde de cómo era la Ducati. Mis sensaciones me indican que la Honda no es tan física como la Ducati, y que en este sentido no tendré tantos futuros como tuve. En los test de Jerez no estaba al 100% físicamente y pude rodar bien".
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