Tras presentar el nuevo depósito, Jorge Lorenzo ve la luz al final del túnel. "El trabajo que hemos hecho está dando sus frutos, quizás no hemos un step gigante, pero son pequeños pasos que me hacen pilotar más cómodo, usar menos energía y pilotar un poco más agresivo. Faltan muchísimas piezas en ese puzle para reducir el medio segundo que todavía nos falta y luchar por podios y victorias. Hay que tener paciencia, intentar valorar todos los avances que ya vamos haciendo, porque seguramente encontremos algún avance en el futuro realmente grande, pero cualquier avance pequeño lo cogemos con optimismo y positividad" confiesa.
A pesar de las adversidades que se cruzan en el camino del #99, Jorge no descarta un cierre de temporada favorable. "Nunca hay que tirar la toalla, los ingenieros están trabajando muchísimo cada día. El lunes seguramente tendremos piezas importantes que probar, y en Brno también. Honda nunca para de trabajar. De momento no tenemos un ritmo para aspirar a terminar entre los cinco primeros o en el podio, pero podemos empezar a aspirar ya al top ten y ese sería nuestro objetivo, hacer una salida, no perder posiciones, mantener la energía, estar concentrados y a ver qué pasa al final de carrera. Entienden mis necesidades, lo que creen que me falta para ir más rápido. Van a intentar darme lo que necesito lo antes posible".En relación al incidente con Marc Márquez, el #99 interpreta la reacción de su compañero de equipo como una respuesta a un estímulo normal y corriente basado en la tensión. "En cada entrenamiento tienes que tirar mucho al final para intentar entrar directamente en la Q1, poner mucha atención. Hay mucha tensión ahí y a veces, cuando crees que ha terminado el entrenamiento -como le ha pasado a Maverick- y a mí en Mugello, puede haber estos imprevistos. Hay que estar atento, intentar cometer menos errores, porque uno no está solo en la pista. Son cosas que pasan, tampoco hay muchas opciones. A veces tienes que entrar por fuerza en la línea, sobre todo en los cambios de dirección, y allí es cuando puedes ser un piloto que quiere hacer su vuelta rápida y te encuentra a ti en el medio, que es lo que ha pasado con Marc. Él sabía que necesitaba otra 'intentona' para asegurar entrar en la Q1, y al perder esa intentona ha sido difícil de asimilar por su arte y estaba caliente como es normal".
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