La pretemporada es el momento ideal para hacer cambios en todos los aspectos posibles y los circuitos no podrían ser menos. Tras el anuncio de las obras en el Circuit Barcelona-Catalunya de cara a la próxima temporada se le suma el mítico trazado de Le Mans. El circuito francés ha vivido un profundo y rápido proceso de cambio, en el que ha renovado el asfalto, mejorando las condiciones de seguridad y agarre de la pista.
Todo comenzó hace un par de años cuando los pilotos de MotoGP comentaron que el agarre estaba en sus últimos días y era complicado encontrar el agarre de la moto, dijo el oficial de seguridad del trazado, Martin Goureau: " El origen de este trabajo fue hace dos años. Los pilotos de MotoGP había planteado dos problemas: el asfalto estaba en las últimas y no tenía agarre, pero sobre todo en muchos lugares había muchos baches y la moto vibraba demasiado y daba saltos".Goureau ha destacado que el viejo asfalto era bastante antiguo ya que llevaba puesto unos 10 años, por lo que las obras duraron unas tres semanas en las que lo dejaron sin imperfecciones:" En total tardamos unas tres semanas para llevar a cabo el trabajo: en primer lugar hemos eliminado el antiguo asfalto, a continuación, hemos eliminado todas las imperfecciones de la pista, se necesitaban tres días para preparar y luego el tiempo de secado ".
Por último ha querido recalcar que la mejora con el nuevo asfalto será importante, poneindo de ejemplo la velocidad de paso en una curva, recalcando que se ha mejorado mucho la adherencia, puesto que parece que las motos vayan sobre carriles, provocando esto que el tiempo por vuelta se rebaje bastante según las simulaciones realizadas respecto el año pasado.: " Con el agua del agarre es una locura , si antes se tomaba la curva Chapelle 70 km / h con la RS10, pasa ahora al 110 y sin que moverse. Es realmente impresionante. No quiero decir demasiado, pero yo diría que el tiempo de la pole será de uno a dos segundos más rápido".
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