Ahora, con la caravana mundialista aterrizando en el Circuito de Austin, escenario que conoce mejor que muchos otros pilotos, Marc Márquez repasa la carrera en la que se convirtió en el primer debutante en los últimos cinco años en conseguir un podio en su carrera inagurual. Lo cierto, es que a pesar de todos los datos comentados, Márquez no termina de creérselo: "No, nunca pensé en conseguirlo. Intentar terminar en el podio era un sueño, pero ese no era el objetivo. Sólo traté de disfrutar y de hacerlo lo mejor posible en todas las sesiones de entrenamientos, calificación y en la carrera. Durante las sesiones libres me di cuenta de que iba a ser muy difícil acabar en el podio, pero luego tuve unas buenas primeras vueltas y lo conseguí".
Como hemos comentado, su duelo con Valentino Rossi será recordado por el piloto de Cervera, puesto que al fin y al cabo se trata de uno de sus mayores ídolos y aunque el podio ya sabe realmente dulce, haberlo conseguido luchando con el piloto más laureado de la historia todavía lo hace más atractivo: "Tengo algunas motos de Valentino en mi dormitorio. Es increíble estar ahí, peleando con tu ídolo. El me adelantó y lo de devolví la maniobra y aunque al final él ganó la batalla, hemos aprendido mucho".
Cambio de chip
Tras un acto celebrado en Barcelona con una marca deportiva, Marc Márquez ya está concentrado en seguir su progresión y aprendizaje en el Circuito de Austin, uno de los cuatro circuitos junto a Malasia, Jerez y Valencia donde llegará con una mínima experiencia sobre su RC213V del equipo Repsol Honda. Hace unas semanas, el piloto catalán ya estuvo en esta pista con la Honda y ahora es el momento de aplicar todo lo aprendido en el test privado donde además marcó el ritmo.
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