Marc Márquez está viviendo un momento muy complicado. Más allá de las graves lesiones, sobre la pista, quizás el peor desde que está en el mundial. Varias voces rumorean sobre una posible retirada, pero son solo noticias falsas. El propio Marc solo quiere salir de esta mala racha trabajando más que nunca para volver a reinar en la categoría reina.
Y lo quiere hacer con Honda, y con ninguna moto distinta. Quiere remontar esta situación como ya la ha remontado varias veces. Y aunque parece que le está costando más de lo normal, este fin de semana en Mugello tiene otra oportunidad para reducir la brecha con la cabeza. Un trazado espectacular al que todo el mundo gusta. "Mugello siempre es un gran circuito para rodar, es muy rápido y cuando vas por la recta en una moto de MotoGP, es una gran sensación", ha comentado para el equipo.Dada la situación que atraviesa, no piensa en un podio, ni siquiera en cualquier otro resultado, si no en empezar a rodar el viernes en el FP1 e ir trabajando para la carrera del domingo. "Veremos que es posible este fin de semana, tenemos que llegar y ver cuál es la situación y dónde estamos", alega el 8 veces Campeón del Mundo, que tiene en el trazado italiano dos podios en MotoGP, más la victoria de 2014 en un gran duelo con Jorge Lorenzo.
Aunque no tenga un gran bagaje como en otros circuitos, Marc tiene buenos recuerdos de Mugello, ya que venció en la categoría intermedia y sobre todo al lograr allí su primera victoria mundialista en 2010 sobre la 125cc. Ahora un triunfo está descartado, pero está luchando con el equipo para volver a esos resultados. "Sé que al continuar trabajando con mi equipo, con Honda, podemos volver a estar donde sabemos que está nuestro potencial", zanja el #93, que todavía no ha subido al podio en este 2022. Veremos si el español es capaz de dar con la tecla de esa Honda que parecía tan competitiva en pretemporada pero donde no se la ha visto en todo el año, salvo Qatar.
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