La inspiración llegó a Márquez cuando más lo necesitaba. En una clasificación de lo más apretada, como siempre en la categoría reina, el de Cervera tiró de galones y martillo para hacerse con la primera posición, algo que ya empieza a ser rutina en el circuito de Sachsenring. Nueve poles consecutivas en el trazado desde que está en el Mundial demuestran que es una de las pistas favoritas del vigente campeón del mundo.
Con una marca de 1:20:270, Márquez volvió a demostrar por qué no tiene rival, más allá de Jorge Lorenzo, que fue de los que más plantó batalla. El mallorquín, próximo compañero de Márquez, fue tercero, a 57 milésimas de Márquez, pero con Petrucci hubo problemas, y fuera del asfalto hubo palabras del corredor español acerca de lo ocurrido con el italiano.El piloto del Alma Pramac se puso a rueda del español, y provocó que hiciese mejor vuelta que el de Palma, algo que no le gustó nada al excampeón de MotoGP. Sin embargo, ambos hicieron un gran trabajo y volvieron a quedar por delante del subcampeón del mundo, Andrea Dovizioso, que se tiene que conformar con la quinta plaza.
El italiano, además de por los tres primeros, fue superado por Maverick Viñales. El piloto de Yamaha mostró un buen rendimiento durante los entrenamientos y fue cuarto, aspirando a todo en la carrera. Por su parte, el compañero de equipo del español, Valentino Rossi, fue sexto y cerrará la segunda línea de parrilla, contento pero a la vez un poco frustrado por no conseguir un mejor resultado.
Por otro lado, hay que fijarse en el trabajo de Dani Pedrosa. El piloto español del Repsol Honda, que anunció este jueves su retirada del Mundial al final de la temporada, fue décimo. Le costó meterse en la Q2, pero fue mejorando de forma paulatina, aunque le queda un poco para poder volver a la pelea entre los mejores del campeonato.
Además, de nuevo, Álvaro Bautista, ha estado dentro de la Q2, y ha dado de nuevo una buena impresión. El piloto del Ángel Nieto Team ha sido noveno, superando a Pedrosa, entre otros, y tiene buenas opciones para la carrera que concluye el Gran Premio de Alemania, en la que la temperatura y el estado del circuito serán fundamentales para el desarrollo del Gran Premio.
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