A falta de cuatro carreras la tensión entre los pilotos es máxima. Ya este fin de semana veíamos cierto nerviosismo en la pista aragonesa. Márquez peleando como en cada carrera de la temporada pasada (y cometiendo errores), pero no ha sido el único. Lorenzo y Rossi también necesitan ser los primeros para sumar lo máximo posible e impedir que su principal rival, el líder del mundial hasta ahora, suba al podio. Pero incluso aunque se de la situación en que el segundo gane todas las carreras, Márquez puede permitirse el lujo de quedar en cuarta posición tres veces y en quinto lugar en otra carrera.
También es matemáticamente posible que Lorenzo se proclame campeón del mundo de MotoGP por cuarta vez, pero aunque el mallorquín gane todas las carreras a Márquez le basta con hacer cuatro séptimos puestos para llevarse el título a Cervera.
Atendiendo a los resultados, y considerando que hasta el momento Márquez sólo ha bajado dos veces de la cuarta posición, resulta inconcebible que lo haga en la recta final del campeonato. Si el piloto español consigue mantener estos resultados, tiene todas las papeletas a su favor.
Rossi
El veterano piloto italiano ha aprovechado la tensión propia del final de mundial para calentar el ambiente. Ha hablado sobre la situación en la clasificación del mundial del año pasado. "Está muy claro que me robaron el título y de muy mala manera", reabriendo las tensiones del final de temporada de 2015.
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