Que la temporada 2018 ha sido bastante complicada para Yamaha, en general, y para Maverick Viñales, en particular, no es un secreto para nadie. El piloto español ha tenido una temporada de altibajos, donde los buenos resultados y los podios se mezclaban con la desesperación en momentos puntuales en los que los problemas parecían no tener solución.
Maverick Viñales es un piloto acostumbrado a pelear siempre por la victoria, y desde su fichaje por Yamaha, hace ya dos temporadas, su nombre siempre ha estado en las quinielas para hacerse con el título. Sin embargo, los problemas que ha tenido la marca nipona para hacer su moto 100% competitiva y poder pelear en igualdad de condiciones con Honda y Ducati, ha hecho que Viñales haya visto como esta posibilidad se alejaba de su alcance.No significa que los resultados del piloto catalán hayan sido malos en el último año, pero sí se ve inusual que Viñales solo haya subido al podio 5 veces esta temporada y haya conseguido una sola victoria.
2018, un año complicado
La temporada la comenzó siendo sexto en Catar y quinto en Argentina. El primer podio llegó en Austin, donde fue segundo por detrás de Márquez. En Jerez y Le Mans fue séptimo, octavo en Italia y sexto en Catalunya. En Assen y Alemania encadenó otros dos podios consecutivos, ambos en tercera posición. Un gran resultado antes de las vacaciones de verano con el que, sin embargo, Viñales tenía sentimientos encontrados.
Por un lado, el piloto de Yamaha estaba feliz por el resultado; por el otro, lamentaba que desde Japón no llegaran las mejoras en la electrónica que podrían hacer luchar a sus pilotos por la victoria cada domingo. "Estoy contento hoy porque me he sentido fuerte con la moto. Lástima que he perdido muchas vueltas con las Ducati, imposibles de adelantar, pero contento con el equipo. Con una buena salida creo que hoy era posible luchar por la victoria. Estoy contento de que Yamaha empiece a funcionar como a mí me gusta. Lástima las primeras vueltas porque no me encuentro con la moto, como si no tuviera neumático nuevo", declaró Viñales tras la carrera.
La segunda mitad de temporada no comenzó muy bien para el piloto español, que no pudo terminar en Brno y fue duodécimo en Austria. En Misano y Aragón terminó dentro del top ten, en quinto y décimo lugar y no fue hasta Tailandia que volvió a subirse al podio, en tercera posición. En Japón fue séptimo y en Australia, penúltima cita de la gira asiática, Maverick Viñales volvió a encontrarse con la victoria. Sin embargo, en las dos últimas carreras, el piloto de Yamaha no pudo reencontrarse con la victoria ni tan siquiera con el podio: en Malasia fue cuarto y no pudo terminar en Valencia.
La victoria de Viñales en Australia rompía la racha de veinticinco carreras sin ganar de Yamaha. "La racha es consecuencia de no haber trabajado bien durante todo el año. Hemos conseguido hacerlo durante todo este fin de semana, prácticamente con la misma moto desde el viernes y trabajando muy bien. Arregla el momento, pero no la temporada. Sí que era muy importante acabar con una victoria, lo llevo diciendo durante muchos fines de semana, y ya está hecha", declaró el piloto tras su triunfo.
Cambios de cara a 2019
Maverick Viñales quiere dar un giro en 2019, y los cambios no se han hecho esperar. Poco después de terminar la temporada, el piloto español sorprendió a todos cambiando su dorsal: del '25' que solía lucir desde su debut en el Campeonato del Mundo ha pasado al '12'. "Es el número con el que empecé y con el que quiero acabar. Cuando llevaba el '12' es cuando gané a mis mayores rivales, así que una de las razones y además me siento muy identificado", explicó el piloto.
Pero este no es el único cambio de cara a la próxima temporada de Viñales. Después de la tensión vivida esta última temporada con Ramón Forcada, en 2019 el piloto de Yamaha contará con Esteban García como ingeniero de pista, quien ya le acompañó en su etapa en Moto3. El otro gran cambio de cara a la próxima temporada, que arrancará en pocas semanas, es la incorporación de Julián Simón al equipo como coach, en sustitución de Wilco Zeelenberg.
"Esteban aportará orden, que es muy importante. Este año fallamos mucho en pequeños detalles que no voy a desvelar porque pueden provocar hasta risas. Creo que Esteban esas cosas las tendrá muy controladas, y él me ha demostrado ser una persona que de un día para otro solo quiere mejorar. Al margen de eso, creo que aportará mucha tranquilidad al equipo, un plan", declaró Viñales acerca de su nuevo ingeniero de pista.
Parecen que estos cambios no le han sentado mal, a juzgar por la constancia que ha demostrado en los primeros test de pretemporada que se han celebrado en Sepang, donde Maverick Viñales terminó como el más rápido el segundo día y en quinto lugar en la tabla combinada de tiempos.
Aunque no se puede saber cómo será la temporada solo por unos test en pretemporada, lo cierto es que todo apunta a que Maverick Viñales está cómodo, relajado, con los cambios en su equipo, algo que siempre es bueno a la hora de enfrentarse a nueve meses de competición. La primera prueba de fuego tendrá lugar en pocas semanas, el 10 de marzo en Catar, donde arrancará una nueva temporada en la que Viñales peleará por estar delante cada fin de semana.
Artículos recomendados