Los equipos de MotoGP no paran de buscar esas décimas que les hagan ser un poco más rápidos que sus rivales, y lo último es el 'dispositivo de arranque' que Ducati hizo famoso a finales de 2018. Aunque ya se experimento hace 15 años de la mano de Honda en el WSBK, y con Álvaro Bautista en su estancia en Gresini, se empezó hablar de ello cuando la marca italiana lo usó con Jack Miller en el GP de Japón de 2018. El sistema gustó, y él, junto a las oficiales de Andrea Dovizioso y Danilo Petrucci, lo utilizaron durante todo el año pasado.
Gigi Dall'Igna estudió como se utilizaba y lo introdujo modificandolo, relacionando su 'holeshot' con el amortiguador trasero en lugar de la horquilla, como venía utilizando Honda en el pasado. Con este dispositivo para arrancar, el amortiguador se bloquea, y por tanto no se dobla cuando sale, reduciendo considerablemente la posibilidad de un caballito. Aprilia también se fijó en ello y Aleix Espargaró ya lo probo el año pasado en Brno comentando para GPOne que: "gracias al nuevo dispositivo que nos ayuda en la salida, estoy seguro de poder recuperar posiciones en la salida, como sucedió en Brno. Entonces se tratará de aprovechar al máximo los neumáticos y ver la evolución de la carrera", comentaba. Los de Noale hacen que se presione la suspensión delantera, como en Motocross, y así evitar el caballito, desactivándose cuando se frena en la primera curva.
Pero ahora hay otro fabricante que se une, Yamaha. Maverick Viñales asegura que la marca de los tres diapasones está trabajando para su 'holeshot'. Hablo para TMCBlog.com que espera probarlo por primera vez en los test de Sepang dentro de dos semanas, del 7 al 9 de febrero. 'Mack' se está preparando muy fuerte en este pretemporada, y espera que su Yamaha mejore esos detalles que le hagas pelear por la victoria en cada carrera. Uno de sus puntos débiles son las salidas. Se ha visto muchas veces que el español perdía muchas posiciones en la arrancada y eso le condicionaba para el resto de carrera.
Yamaha ha mejorado en 2019, mejorando en varios términos. "Creo que encontramos un buen compromiso con la moto. Hemos sido rápidos en casi todas las carreras desde agosto. Nuestro chasis es fantástico. Nuestra velocidad máxima no es la mejor, pero podemos vivir con eso", admite el #12. Pero se enfoca en las salidas. "Para mí es una prioridad que mejoremos los inicios. Todos los pilotos de Yamaha pierden posiciones valiosas al comienzo. Es por eso que Yamaha está trabajando en un dispositivo de arranque. O algo como lo tienen los oponentes, o tu propio sistema. Estamos tratando de probarlo en Sepang. Tenemos dos objetivos para 2020: necesitamos mejorar los inicios e intentar alcanzar la velocidad máxima", zanja el piloto de 25 años.
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