El 'shakedown' de Sepang ya ha echado a rodar en el trazado malasio de Sepang, donde los equipos de pruebas de las diferentes fábricas pueden poner en valor el trabajo realizado durante los meses invernales y tenerlo todo preparado para los primeros test oficiales de la semana que viene. A Malasia solo viajaron los diferentes 'test-teams', a excepción de aquellas marcas con concesiones reglamentarias. Una de estas fábricas beneficiadas es KTM, que llevó a un total de cinco pilotos: los oficiales Espargaró y Zarco, los satélite Oliveira y Syahrin y el probador Kallio (en sustitución del lesionado Dani Pedrosa).
Pese a haber viajado con todos sus pilotos, el único que salió a pista el viernes fue Mika Kallio, quien se ocupó de confirmar que todo estaba en orden de cara a los dos días restantes. El finlandés, además de RC16, estrenó nuevo dorsal, viéndose obligado a cambiar al #66 tras la llegada de Joan Mir (#36) a la categoría. Kallio es uno de los 'padres' de la RC16, habiendo colaborado en el proyecto desde los albores del mismo. "Estamos mejorando la moto poco a poco, pero aún estamos muy lejos del 100 por ciento y todavía hay mucho trabajo por hacer", comentó tras concluir la primera jornada de trabajo. Mika, pese a asistir como sustituto de un lesionado, él tampoco se encuentra en el mejor estado de forma, arrastrando molestias de su operación en la rodilla derecha. "Lucho en las curvas de derechas para conseguir la posición de conducción correcta, porque todavía me falta algo de movimiento y flexibilidad en la rodilla. Es por eso que, en la práctica, no puedo usar el freno trasero, porque la pierna no funciona de manera adecuada. Esto está causando algunos problemas, pero de todos modos estoy bastante satisfecho por hoy".
"Esperaba incluso tener peores sensaciones con la rodilla, pero pudimos trabajar bastante bien de todos modos e hicimos muchas vueltas, lo que es importante. Incluso si tal vez el tiempo de vuelta no es el mejor debido a esos problemas, podemos probar diferentes cosas". Cuando fue inquirido acerca de utilizar un freno trasero 'de pulgar', Kallio no se mostró muy favorable: "nunca he sido muy fan de los frenos de pulgar. Lo intenté hace años, tal vez hace diez años, en 250cc., pero realmente no me gustó. Así que no tengo grandes recuerdos. Pero necesito ver cómo progresa la rodilla, si todavía no me he recuperado a mitad de temporada tal vez haya una posibilidad de que lo probemos".
Su jornada laboral resultó ser extenuante, llegando a probar hasta siete motos diferentes. El finlandés condujo todas las RC16, cerciorándose de que todo esté listo para que cuando los pilotos fijos salgan a pista no tengan ningún problema. "Necesitaba correr en las motos de los otros pilotos, que comenzarán a probar mañana. Básicamente hice vueltas con las motos de Pol y Johann, luego cambié a las motos del Tech3. Al final, fue bastante interesante porque todos tienen una configuración y posición ligeramente diferentes en la moto, así que pudimos comparar un poco cómo se siente cada uno con sus configuraciones. Después de eso cambié a mi moto e hice alrededor de 30 vueltas".
Paralelamente, ya con su montura, Kallio probó las nuevas alas diseñadas por KTM al estilo de Ducati o Yamaha. "En realidad sí, fue la primera vez que probé ese tipo de ala. Es como siempre, hay algunos puntos positivos, algunos negativos, pero tenemos que decidirlo más adelante, cuando veamos lo que prefieren los otros pilotos. Todos piensan que las alas realmente traen mucho tiempo de vuelta, pero al final la diferencia es muy pequeña", concluyó el probador.
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