Tanto era el dolor que sufría el piloto de la formación española que Nicky Hayden decidió perderse el test post-GP que se celebraba el lunes en Jerez para no forzar su mano y poder viajar a Estados Unidos. Mientras que en esta jornada de pruebas programada para MotoGP era el japonés Hiroshi Aoyama el encargado de cargar con todo el trabajo, pocas horas después Nicky Hayden viajaba a Estados Unidos para ser sometido a nuevas pruebas por sus médicos de confianza para ver cuál era la razón de los dolores y el hinchazón o si se trataba de una recaída de la operación del año pasado.
Todo parece en su sitio
Después de las pruebas realizadas en Estados Unidos, el piloto de Kentucky puede estar de enhorabuena ya que en principio no hay nada grave, tal y como afirman los especialistas norteamericanos pero como también hicieron los médicos de la Clínica Mobile en primera instancia. Por ello, el '69' espera estar a pleno rendimiento en el GP de Francia, que se disputa este próximo fin de semana en Le Mans.
"Los doctores en California coincidieron con los doctores de la Clinica Mobile. Después de hacerme una resonancia y varios escaneos vieron que no tengo nada grave en la muñeca. Simplemente parece que he sufrido alguna irritación en la articulación durante la sesión de clasificación. No se sabe con exactitud qué pudo producir esa inflamación en la mano. He recibido tratamiento y algunas inyecciones por parte de los médicos para relajar la zona inflamada. Ahora sólo es cuestión de seguir con terapia unos días, descansar y dejar que se cure para Le Mans, espero que todo vuelva pronto a la normalidad. Estoy bien, en casa, recibiendo terapia y preparándome para Le Mans" afirmaba Nicky Hayden recientemente.
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