Si bien muchos pilotos celebraron el final de temporada, figuras como Philipp Öttl se despidieron por última vez del paddock de MotoGP. 2019 dejó mucho que desear para el piloto alemán, llegando a las primeras veinte carreras sin estrenar su casillero. Siguiendo las directrices de Hervé Poncharal, Philipp encontró razones por las que seguir luchando, pero una vez concluido el campeonato, el piloto de 23 aseguró que no tenía nada que celebrar. "La confianza ya se había ido en 2018. Nuestro equipo se desintegró ese verano y la confianza en mí mismo ya había desaparecido después de la temporada de Moto3", confesó en declaraciones recogidas en Speedweek.com.
Plantando cara a las adversidades y recuperado físicamente, Philipp Öttl decidió seguir su camino en el campeonato. Sin embargo, a su regreso la cosa no fue a mejor y el hijo de Petter Ottl tuvo que ausentarse durante varias citas debido a una conmoción cerebral y una lesión cervical. Tras su regreso al asfalto, nada había cambiado para el alemán. "Me llevó un tiempo volver a ponerme en marcha. Pero disputamos nuestra mejor carrera en Austria. Cambiar de motores Honda a Triumph hizo que Kalex fuera más mucho mejor en 2019 y las KTM más lentas. Podría decir muchas cosas, pero eso no importa ahora. Obtuve la primera actualización en Austria y piloté lo mismo que Marco", amplió.El hecho de no ser competitivo redujo la motivación de Philipp y la indudable mejora de sus oponentes destruyó la confianza del alemán. De esta manera, una diferencia abismal separaría su transición de Moto3 a Moto2. "Antes de la primera prueba con los motores Triumph en noviembre de 2018, me puse a los mandos en una Moto2 durante dos días. Eso fue en Aragón, cuando probé la KTM de 600. Yo tenía menos experiencia con ellas que la competencia", aseguró. "El equipo de Tech3 ha tenido mucha experiencia en Moto2, incluso con esos cambios. Luego llegaron muchos otros consejos y fue difícil diferenciar entre lo que tenía sentido y lo que no. Por ejemplo, la base de datos de Marco Bezzecchi era Bagnaia, quien le dijo cómo pilotar. Eso fue bueno para él. Pero con mi estilo de conducción había mucho que cambiar", agregó.
Sin embargo, el hijo de Petter Ottl asegura que aprovechará esta experiencia para disfrutar al máximo su participación como piloto de Supersport. "Creo que el año de Moto2 me ayudará mucho en 2020. En Moto2 generalmente aprendí mucho sobre cómo llevar motos pesadas. En realidad, crees que tienes que ser más suave en una moto más pequeña porque cada movimiento del cuerpo tiene un mayor impacto, pero no puedes trabajar tanto en una moto tan grande", concluyó.
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