Pol Espargaró ya cuenta los últimos días sobre la Honda. Dos años muy difíciles para él con alguna alegría y mucho sufrimiento, que termina este fin de semana en Cheste. Sólo ha tenido un buen resultado en la prueba inaugural en Qatar cuando finalizó tercero. El resto del año no ha aparecido y han sido varias las ocasiones donde ha manifestado su nula mejora durante toda la temporada. Con la moto igual que en Qatar, el español dice que desde la fábrica sólo han escuchado a Marc Márquez, olvidando tanto a él como a los pilotos del LCR.
Aún habiendo sufrido estos dos años con la marca japonesa, Pol agradece a todo el equipo todo lo vivido en este tiempo. "Va a ser un fin de semana emotivo, el último con el equipo Repsol Honda. Quiero agradecer a todo el mundo dentro de HRC, a Repsol y al equipo estos dos años. Juntos hemos vivido algunos momentos increíbles y luchado para superar los tiempos difíciles", ha comentado el piloto de 31 años.
Intentará finalizar el año de la mejor manera posible en un trazado que le gusta, y donde logró un tercer puesto en 2020 sobre la KTM, su futura moto que ya podrá probar el próximo martes en los test. "Valencia es un circuito que disfruto mucho, no tuvimos suerte el año pasado, pero quiero despedirme de todos con un buen fin de semana", ha declarado el #44.
Un fin de semana donde se pone de objetivo disfrutar su última experiencia sobre la difícil RC213V. "Simplemente disfrutemos esta última carrera y concentrémonos en los aspectos positivos que logramos juntos. Gracias a todos", zanja agradeciendo de nuevo a todo el equipo. Un año donde, de momento, es 16° en la clasificación general con 56 puntos, muy por debajo de las expectativas a principios de año. Veremos cómo le va en 2023 sobre una moto que conoce muy bien, aunque en este 2022 han sido el peor equipo de la parrilla con dos grandes pilotos como Remy Gardner y Raúl Fernández, ambos rookies. En 2023 compartirá box con el posible Campeón del Mundo de Moto2, Augusto Fernández.
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