De las cuatro KTM que compiten en MotoGP, solo la de Pol Espargaró pasó por meta en Sachsenring en posición para obtener puntos. Aún así, el español no estaba satisfecho con su duodécimo puesto en carrera, ya que, según comentaba, los neumáticos no dieron su mejor resultado.
"El neumático trasero duro se sentía como un neumático para una carrera que solo dura 15 vueltas. Después de eso, el neumático empezó a degradarse fuertemente. En las vueltas 15 a 20 no pude conducir a un buen ritmo y estaba entre el 1'22 alto y el 1'23, cuando debería haber sido, aproximadamente, un segundo más rápido. A partir de la 20ª vuelta el neumático se había acabado, estaba completamente desmontado. No quedaba nada", se quejaba el de KTM.Pero este problema no solo afectó a Pol Espargaró. El resto de las KTM que había en pista también lo sufrieron. En concreto, el de Granollers, hacía referencia a Hafizh Syahrin, del equipo Red Bull KTM Tech 3: "Syahrin tuvo un problema similar y eso demuestra que algo está mal con los neumáticos en nuestras motos, porque él también pilota una KTM".
"El problema es que no usé en exceso ni sobrecargué el neumático porque verificamos los datos y la temperatura de este fue constante durante la carrera, lo que, por supuesto, es útil para mantener un agarre constante hasta el final", continuó el pequeño de los Espargaró, "me he concentrado en ahorrar los neumáticos porque sé que la KTM está ejerciendo más presión sobre el neumático que otras motos".
"Especialmente al comienzo de la carrera soy muy cuidadoso cuando todos los demás aceleran. Aunque pierdo algunas posiciones, me aseguro de estar bien posicionado hacia el final de la carrera, pero, aun así, en Sachsenring perdí el agarre necesario demasiado pronto. En comparación con mi hermano en Aprilia o Suzuki y sus corredores principales, tuvimos muchos más problemas en ese sentido", añadía.
Todos estos problemas con los neumáticos derivaron en su resultado en Sachsenring, un buen resultado, pero con el que el piloto de KTM no estaba contento. "La consecuencia fue que tuve que conducir en el puesto 12 antes de la última curva. Me puse de pie desde el momento en que pisé el acelerador hasta que toqué el bordillo y, una vez en las curvas, la moto estaba muy inquieta. Definitivamente no era algo normal".
"No estoy diciendo que sea un problema de Michelin. No hicimos algo bien o tal vez el neumático simplemente no es bueno para nosotros en la carrera. Tal vez también perdimos la configuración. Algo estaba mal, la degradación de los neumáticos no es normal, tenemos que mirar más de cerca y descubrir qué estaba pasando", concluía Pol Espargaró, que tras la novena cita de la temporada, de cara a las vacaciones, se posiciona décimo en la clasificación general, siendo el suyo el mejor resultado para KTM.
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