En cualquier caso, esta prueba no será un hecho aislado ya que Eugene Laverty además de estar con el prototipo de 1000cc en el trazado japonés, también tendrá un test en Phillip Island, un circuito que conoce mejor por estar presente en el calendario del Mundial de Superbikes, pero también el de MotoGP, por lo que las sinergias entre ambas partes pueden ser muy positivas. En Okayama los datos serán menores ya que si bien Suzuki en el pasado ha hecho test en esta pista, en principio el nuevo prototipo no ha pisado estas instalaciones, al igual que le sucede al propio Laverty.
Como es lógico, Eugene Laverty se mostraba entusiasmado antes de arrancar este primer test: "Hable con mi hermano Michael sobre los neumáticos de Bridgestone y aunque no los conozco, me han dicho cosas sólo muy positivos. De todas maneras, creo que estos neumáticos no son de otro planeta como algunos quieren hacer creer. Desafortunadamente el test en Phillip Island será con tiempo invernal, por lo que los datos no serán tan certeros, pero es una ocasión perfecta".
Trabajando en su futuro
Estos test son algo más para Eugene Laverty. Ponerse al servicio del equipo de test del fabricante de Hamamatsu no sólo implica colaborar con el desarrollo de la montura japonesa, sino también luchar en la distancia contra Randy de Puniet por poder ocupar la segunda montura del equipo ahora que parece que en Suzuki están determinados a buscar un piloto top -sea cual sea su identidad- para la primera montura del equipo, con el fin de que este cargue con el peso de la estructura.
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