El MotoPort Kawasaki oficializó hace apenas unos días los pilotos con los que contará en 2019, siendo el tercer año de contrato para Scott Deroue y el segundo para Robert Schotman, dos jóvenes pilotos de Supersport 300 con hambre de victoria repitiendo temporadas con la Kawasaki Ninja 400.
Por parte de Deroue, lleva dos años metido en la pelea por el título, aunque a final de temporada -por algunas circunstancias- no llegaba al nivel y tanto en 2017 como en la temporada que acaba de finalizar ha quedado tercero del mundial, a pesar de que este año haya acabado con menos puntos ya que ha habido una carrera menos en el calendario.Con 3 podios de los cuales ha obtenido una victoria, Scott también ha tenido malos momentos como las caídas en las citas de Imola y Misano, pero aun más doloroso fue el abandono en Francia, ya que todavía estaba en juego el campeonato y podía optar al subcampeonato, que lo tiene Mika Pérez frente al histórico triunfo de Ana Carrasco con sólo un punto de diferencia, prácticamente como el pasado año.
La segunda campaña de Supersport 300 ha sido más difícil en el caso de Schotman. El año pasado corrió con una Yamaha R3 y quedó séptimo en la general. Sin embargo, las cosas han dado un giro drástico para Robert, que cambiaría a Kawasaki en 2018, por lo que tendría que aprender más de la categoría y adaptarse a otra nueva moto.
El holandés ha participado tan sólo en 5 de 8 carreras de esta temporada, ya que ha pasado por una grave lesión en la pelvis en la caída de la prueba de Imola, un golpe de efecto para el piloto europeo. Esto no evita que el año que viene pueda volver a competir en el mismo campeonato junto a otro piloto fuerte como es Scott Deroue.
Artículos recomendados