Scott Redding se enfrenta a su segundo año como piloto oficial de BMW. En 2022, tras un comienzo donde estuvo perdido, fue de menos a más y llegó a estar en el podio muy cerca de la victoria. En este invierno, las mejoras en su moto no han sido las esperadas. Aunque parten a priori como la peor marca, sabe que tanto él como el equipo tiene el potencial de remontar la situación.
En los últimos test oficiales en Phillip Island, Scott poco a poco se fue sintiendo mejor tras unos cambios. "En los test, hemos trabajado para sentir más la moto y, a medida que la pista comenzó a tener más agarre, comencé a sentirme mejor. Probamos algunas cosas para ayudar con el agarre trasero nuevamente y trabajamos en la electrónica para tener más sensaciones en esa área de la moto", resume el #45.Sabe que aún no está listo para luchar por los puestos cabeceros, pero que es cuestión de hacer más kilómetro a su BMW. "Todavía tenemos trabajo por hacer. Todavía no me siento muy confiado, pero está llegando poco a poco cuanto más me monto en la moto", cree el piloto de 30 años.
Por el momento no se fija un objetivo claro. Hasta que no arranque los primeros fines de semana de carreras no sabrá exactamente dónde está y a dónde puede llegar. "Cuando miras los tiempos de vuelta, estoy muy cerca de todos. Por lo tanto, será difícil decir cuáles son los objetivos para las dos primeras rondas y la carrera es obviamente diferente a los test", reconoce.
La acción comienza ya en Australia, y hasta que se vea en carrera no se verá claro. Pero espera que pueda meterse en la lucha por el top 6. "Estaría feliz de obtener algunos resultados entre los seis primeros en las primeras carreras. En general, solo tenemos que ir viendo dónde estamos después de la primera carrera para mejorar eso", zanjó.
Artículos recomendados