Maverick Viñales afrontará este fin de semana su cuarta temporada en la categoría reina, segunda con los colores de Yamaha. Y lo encara con muchas ganas a pesar de que sigue trabajando a fondo con su equipo para resolver los problemas de electrónica de su M1. El Campeón del Mundo de Moto3 en 2013 le hubiera gustado que la temporada hubiera arrancado como arrancó 2017, donde se sentía a gusto pilotando. Pero la realidad no es esa y no le queda otra que seguir hacia delante e intentar conseguir una victoria como la del año pasado en su estreno con la Yamaha.
El de Figueras lo recuerda muy bien y desea volverlo a repetir el domingo. "Estoy tan emocionado de venir a Qatar y comenzar la nueva temporada. No puedo esperar! El año pasado fue difícil para mí con muchos altibajos, pero sobre todo aprendí mucho durante la temporada con mi M1, y ahora siento que podemos hacer grandes cosas este año y que podemos luchar durante todo el campeonato para ganar el título", aseguraba el #25.
Confiado
Aunque no lleguen como teóricos favoritos al inicio del mundial, Maverick tiene claro que estarán en la parte alta desde el principio y llegarán a tope para la hora de la verdad, la carrera a las 17:00 hora peninsular. "Estoy seguro de que siempre seremos desafiantes en la cima. La pretemporada nos ha ayudado a probar muchas cosas y finalmente encontramos una buena puesta a punto. Todavía tenemos algunos pequeños problemas con la electrónica, pero creo que alcanzaremos nuestro 100% en el primer GP", comentaba Viñales en un comunicado para yamahamotogp.com.
Respecto a la pista qatarí, tiene muy buenos recuerdos, ya que ha vencido en dos ocasiones, la primera en el debut de las Moto3 en 2012, y la segunda el año pasado. Además subió a la segunda plaza en 2013 y fue 4º en su única temporada en la categoría intermedia. "Qatar es una pista que realmente me gusta, gané mi primer GP con Yamaha allí, así que tengo recuerdos muy especiales y haré todo lo posible para estar en el podio nuevamente esta semana".
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