Revisamos la Ducati Hypermotard 1100 de 2007

Para todos aquellos neófitos, la Ducati Hypermotard puede resultar algo extraño. Al no disponer una estética que encaje perfecta y visiblemente en un segmento concreto. Parte de la categoría Supermoto o Supermotard, una excitante especialidad deportiva que combina distintos tipos de firme y aunque la Hypermotard no disponga de las características concretas de las Supermotos, se inspira en cierta manera en ellas.

Diseñada por Pierre Terblanche, fue presentada en el EICMA de Milán de 2005, por lo que su diseño original tiene básicamente ahora 10 años, en dicho evento obtuvo el premio Best of the Show y Ducati comenzó su fabricación en el año 2007, tras numerosos rumores de que la marca finalmente sacaría una supermoto.

Hemos dispuesto recientemente de una unidad de la primera generación, las equipadas con la mecánica original del modelo, el motor DS 1100, de 1.078 centímetros cúbicos. Un motor menos puntiagudo que sus sucesores pero que dispone de más patada en baja. Además, de contar con embrague en seco, al contrario que la Hypermotard 796, que salió en 2009.

Supermoto

Como decíamos al principio, la Hypermotard 1100 no podemos encajarla dentro de un segmento específico, ya que por arquitectura realmente es una moto de carretera con una estética un tanto peculiar, muy conseguida y agresiva. Aunque en 2008 una Hypermottard 1100 ganó nada menos que el Pikes Peak Hill Climb, por primera vez para la marca italiana en los casi cien años de historia de la célebre prueba estadounidense.

Los de Borgo Panigale ofrecieron con esta máquina sobre todo un juguete para divertirse conduciendo, no necesariamente a máxima velocidad, ya que para eso el el catálogo de Ducati siempre han existido todo un surtido de deportivas, de lo mejor del mercado, por lo que la Hypermotard es una moto potente y con una estética muy agresiva, ideal para aquellos que disfrutan de las curvas sin necesidad de tener que vivir agazapados tras una cúpula y constantemente en posición de 'ataque'.

Es en definitiva una moto para divertirse conduciendo, de hecho, no está pensada para hacer trayectos de largo recorrido, ya que su pequeño depósito solo es capaz de albergar poco más de 12 litros de combustible, por lo que un trayecto de 500 kilómetros nos obliga a parar varias veces a repostar carburante.

En el siguiente artículo trataremos de analizar en detalle la técnica de este modelo, una de las más divertidas y agresivas del panorama, aunque actualmente, sus sucesoras ya han adelantado tecnológicamente.