Su versión básica puede no asustar por sus cifras, aunque en todo caso no son malas en absoluto, 159 CV para 170 kilos de peso, aunque lo importante es el acopio de tecnología, la misma empleada en competición y que la marca ha adaptado para poder ser matriculada, además de poner a la venta un kit exclusivo para pista, que baja 10 kilos el peso de la RC 213V-S aumentando su potencia hasta unos 215 CV.
Homologación
Pero sus increíbles datos no serán iguales en todos los países, ya que al parecer, según la misma web de Honda, la RC 213V-S no disfrutará de esas cifras en todos los países donde será comercializada. En Estados Unidos, por ejemplo, tan solo erogará 102 CV en su versión básica, bastante potencia menos que la versión europea, y lo que es peor, no estará disponible el kit TRack-only, por lo que los estadounidenses no catarán la variante de 215 CV.
Si esto no fuera de por si lo suficientemente llamativo, en Japón, su propio país de nacimiento, sí que tendrán disponible el susodicho kit track-only de manera opcional, pero el modelo en su versión básica no dispondrá ni de la mita de potencia que la homologada en Europa, anunciando tan solo 70 CV. Una cifra de potencia inferior incluso que las de muchas monturas de media cilindrada del mercado.
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