Conocimos la noticia hace unos meses: La próxima temporada Suzuki volverá competir en la categoría más importante del Mundial de Motociclismo, MotoGP y se presentarán con su recién presentada moto, la GSX-RR que, además de por sus virtudes técnicas, destaca por su espectacular decoración con el mítico color azul Suzuki de competición
Como ya sabemos, la marca nipona suspendió su participación en MotoGP hace cuatro temporadas, pero ha seguido desarrollando una moto que no deja de ser un auténtico banco de pruebas para sus modelos de serie y que apunta alto en su regreso a los circuitos. Ahora, todos los amantes de las motos deportivas y los seguidores del equipo Suzuki están de enhorabuena porque las hermanas pequeñas de la GSX-RR, la GSX-R600 y la GSX-R750, estarán disponibles en el color azul de competición que podemos ver en MotoGP.
Colores de guerra para el día a día
Con esta maniobra, Suzuki quiere demostrar a sus aficionados las ganas que tiene puestas en su ansiado regreso, y la confianza puesta en su nuevo proyecto de MotoGP, donde esperan rendir a un gran nivel.
El modelo 2015 de la GSX-R600 ya está disponible en los concesionarios españoles en dos colores: azul MotoGP y blanco. Por su parte, la GSX-R750 ofrece una gama cromática algo más amplia: azul MotoGP, rojo y negro. La primera cuesta 11.999 euros, mientras que por la 750 hay que pagar mil euros más. La actualización de ambos modelos incorpora los últimos y más avanzados desarrollos tecnológicos de Suzuki (muchos de ellos provienen de las experiencias obtenidas en el desarrollo de la GSX-RR, con la que competirán) y las colocan como unas de las superdeportivas más eficientes, rápidas y divertidas del mercado, ya sea en circuito, o en carreteras abiertas. De hecho el gran mérito de Suzuki no estriba en las estratosféricas prestaciones de sus GSX-R, sino en su facilidad e idoneidad para poder usarlas a diario, tanto en el tráfico urbano, como en largos viajes por todo tipo de carreteras y autopistas.
Ambas, representantes del estilo más deportivo de la marca, y cuyas versiones iniciales surgieron allá por la década de los 80, mantienen intacta su identidad de origen y la combinan con mejoras notables que las avalan como referentes de las supersport. La ligereza de la GSX-R600, con 187 Kgs. de peso y más de 120 CV, y la aún más potente GSX-R750, ofrecen una conducción y un comportamiento sin igual para estas dos Supersport.
Artículos recomendados