Todo hacía pensar que desde una posición tan retrasada, Denny Hamlin podía tener una carrera complicada pero tan solo tardo 94 vueltas en llegar a la parte de arriba después de adelantar a Kyle Busch. Desde entonces, Hamlin dominó la carrera con mano de hierro y consiguió estar en el puesto más alto en 193 de las 300 vueltas de las que estaba compuesta la carrera.
Aunque a falta de 28 vueltas para el final Denny Hamlin tenía una ventaja cómoda de siete segundos con su Toyota y una bandera amarilla, fue lo único que pudo poner en apuros su victoria, aunque finalmente nadie pudo rebatir su triunfo. En segunda posición terminó Jimmie Johnson y tercero fue Jeff Gordon. Por su parte, Tony Stewart terminó en la séptima posición y Brad Keselowski fue sexto, por detrás de Clint Bowyer que fue cuarto y de Kasey Khane, que terminó en la quinta posición.
Al rojo vivo
Tras la victoria de Hamlin, el piloto de Gibbs Racing se cuela de nuevo en la tercera posición y se mete en la pelea por el liderato que ya ostentaba al comenzar el Chase. Primero de la clasificación tras su segundo puesto en New Hampshire es Jimmie Johnson. Por su parte, Brad Keselowski es segundo y Tony Stewart es el cuarto clasificado. Entre los cuatro pilotos hay un margen de 15 puntos.
Artículos recomendados