Tanto el #4 de Stewart-Haas como el #2 de Penske se llevaron de forma muy dispar las carreras de Phoenix y Las Vegas respectivamente. Eso sí, siempre con la sombra de Dale Earnhardt Jr. acosándoles.
La victoria de Harvick en su nuevo equipo fue cercano al paseo, aunque tuvo que ir rápido durante toda la prueba. Disputada en Phoenix, la previsión avisaba de lluvia -en el desierto, irónicamente- y hubo mucho jaleo aunque pocas neutralizaciones. Harvick lideró un total de 224 vueltas, siendo el hombre que más giros encabezó. Por detrás, Dale Earnhardt Jr hacía segundo.
Por parte de Keselowski, el #2 de Penske se impuso el pasado domingo en Las Vegas Motorspeedway en un final de infarto. Tras la última parada, Keselowski salió con más carburante que Dale Earnhardt Jr. El #88 de Hendrick aguantó el tirón, pero en la radio le decían que conservaran combustible. Iban tres cuartos de vuelta por detrás de lo necesario para llegar. En la grada se mordían las uñas - Deale Earhardt Jr., por ser hijo de The Intimidator, es muy popular- y no les faltaba razón. Si ganaba se aseguraba el pase al Chase.
Sale la bandera blanca y Dale seguía en cabeza cuando, al entrar en la recta trasera el Chevrolet SS buscaba respirar pero no encontraba esa ambrosía que es la gasolina y se quedaba sin parte de la potencia del motor. Pese a ello, el #88 llegó a la meta, justo por detrás del ganador, Brad Keselowski. Tercero fue un impresionante Paul Menard, quien estuvo toda la carrera a la espera de un error de los de delante.
La clasificación, territorio Penske
Algo que ayudó a Brad Keselowski a estar en pos de la victoria en Las Vegas fue la sesión clasificatoria del viernes noche. El de Michigan conseguía ser segundo tras su compañero Joey Logano. Ambos tienen ya una pole en este 2014 y el equipo Penske se ha adjudicado las dos clasificaciones disputadas al estilo F1.
Debido a la aerodinámica de los Gen6, las carreras son más estilo resistencia que nunca, y las turbulencias siguen provocando dificultades de ver carreras apretadas. Como contrapartida, el hecho de que la victoria te de un pase casi inmediato al Chase provoca que la gente se arriesgue, como hiciera Dale Earnhardt Jr. en Las Vegas, asegurando tensión hasta el final.
Así pues se llega a Bristol. La cita de este fin de semana en el Thunder Valley pinta ser interesante, ya que la clasificación sufre cambios de normativa a petición de los propios equipos. En ellas ya no se podrán dar las vueltas de refrigeración y en el pit-lane se podrá colocar un elemento para ventilar el motor, rebajando la temperatura del mismo. Eso sí, sin poder abrir el capó.
Earnhardt está en racha, y busca una segunda victoria para asegurarse su participación en la caza. ¿Qué sucederá una vez se cumpla ese requisito? ¿Veremos a Junior más calmado? Por ahora es mejor centrarse en Bristol. Y en Harvick y Keselowski, quienes buscarán esa segunda victoria también.
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